Los mexicanos ya no creemos, no nos resulta atractivo, menos trascendente acudir a las urnas cuando se convoca a elecciones, sean cual sea la razón. “La burra no era arisca, los palos la hicieron”, dice el refrán popular.
No es culpa de la sociedad, es de ustedes corruptos partidos políticos, nefastas autoridades electorales (especialmente INE), ineficientes autoridades federales (Gobernación, Fepade, Tribunales, etc.), ciertos medios de comunicación (entreguismo) sobre todo las televisoras, entre otros, por la colusión, corrupción, intereses personales, económicos y políticos, que desdeñan y sólo abonan a sus bolsillos y posiciones de grupo, ignorando a más de 80 millones de electores cautivos, a quienes sólo les servimos el día de las votaciones y sanseacabó.
Desde luego no es nuevo esto, déjenme les digo, desde que tengo uso de razón, al cumplir 18 años responsablemente he acudido cada seis y tres años a depositar mi sufragio, hoy a los 65 años sigo viendo más de lo mismo: las mismas mentiras que escuché durante “la dictadura perfecta” del PRI, que la decena trágica del PAN y el cuatrienio peñista, promesas, compromisos, firmas ante notario público, y nada… más de lo mismo, o peor aun, una crisis severa de credibilidad en el Sistema PRI/Gobierno Federal y Sin Partido/ GCDMX, desempleo, informalidad, inseguridad, pobreza y pauperización de más de 45 millones de mexicanos… y todavía quieren que les creamos ¡vaya cinismo e irresponsabilidad!
El miserable “elefante blanco”, o sea el INE, incapaz, coludido, indiferente, sesionando en favor de los partidos políticos, pese a las marranadas de esas empresas políticas insaciables, consumidoras de dinero público, sin comprobar, arbitrados por millonarios jeques que sentados en cómodos sillones cobran anualmente millones de pesos, sin juzgar ni sancionar las suciedades de sus protegidos.
¿Y todavía quieren que les creamos? Cuántas anomalías, violaciones a la Ley respectiva cometen TODOS los candidatos y sus partidos antes y durante una elección; se detectan, se denuncian, se comprueban, ratifican y nada. Las cosas siguen igual, ante la indolencia de los Consejeros Electorales y su nefasto e inútil Consejero Presidente, Lorenzo Córdova Vianello, a quien le da asco los grupos éticos del país.
La sociedad ya no les cree, pese a las campañas cómplices que nos indilgan los medios afines al Sistema, pero no es más que suciedad, boñiga, mentiras, falsedades, aunque pretendan aplicar la máxima de “una mentira repetida miles de veces, se convierte en verdad”, ya no aplica en estos tiempos.
Políticos y “esos medios” corruptos nos creen tontos, cándidos o ciegos, pero no es así, ya aprendimos de nuestros errores y se demuestra, en cada elección, con el alto abstencionismo, es decir, la gente va a la urna, pero vota en minoría, los más anulan el sufragio, grafitean la boleta (se anula) o tachan más de 3 opciones, papeleta inutilizada.
Esto nos lleva a considerar que el 5 de junio de 2016, al menos en la Ciudad de México, en la elección para la Asamblea Constituyente, los capitalinos cobrarán factura a los partidos y los 40 “ilustrados” que redactarán el borrador de Constitución Política de la Ciudad, serán los designados por Peña, MAM, Diputados y Senadores (40 en total) y los restantes 60 serán cuestionados, pues formarán más de lo mismo: políticos viejos o venidos a menos, porque así lo dispusieron los partidos.
Los 60 constituyentes electos no representarán intereses sociales, porque son extraídos de colores, facciones, tendencias y cotos de poder, alejados de las necesidades y deseos de prosperar de una población humillada, golpeada, insultada, ignorada por un gobierno mancerista que perdió el rumbo, apenas un año después de iniciado.
Lejos de sentir ánimo por elegir a hombres probos que plasmarán sus ideas y consensos populares en lo que será la Carta Magna de la Ciudad, el capitalino está molesto, rechaza la idea, como lo dice un cibernauta en las Redes Sociales. Es sólo un ejemplo, que conste: Arturo González · Propietario en Mipron: “otra jalada y tomada de pelo a nosotros, los verdaderos capitalinos. Se reparten el pastel como hienas tras la presa, encabezados por el carroñero mayor, Mancera. Sólo falta que los ciudadanos aprobemos el bodrio de “constitución” que se van a aventar éstos corruptos”.
No lo digo yo, es el sentir de la ciudadanía que ya no cree en autoridades, políticos, funcionarios que no responden a la vocación de servicio, para lo que fueron designados.
Baste otro ejemplo para demostrar esto. Mientras Mancera realizaba turismo político en Paris, placeándose para hacer curricula, con miras a 2018, en su CDMX, se aplicaba el Doble Hoy no circula, por la mugre que respiran los capitalinos. Además a sus custodios de Reclusorios se les escaparon dos peligrosos secuestradores, cuando eran trasladados a una audiencia judicial. Se le inunda parte de la Delegación Iztapalapa, con daños a más de 500 viviendas, por la falta de desazolve de las alcantarilla, responsabilidad atribuible tanto a la Delegación como al gobierno central. Súmele el fracaso de su mega Rueda de la Fortuna, que neciamente quería montar en la primera sección del Bosque de Chapultepec y que la sociedad presionó para evitarlo.
Mientras los capitalinos sufrimos, el señor “sin partido”, en compañía de su secretario particular, Luis Serna Chávez, se daban vida de millonarios, en la Ciudad Luz, con dinero del erario de la CDMX, vendiendo a los francés su electorero Programa “Médico en tu casa”, como si el cargo para el que fue electo en 2012, lo obliga a turistear con afanes meramente electorero.
Por qué votar, si Veracruz, es un ejemplo indigno de corrupción, asesinatos, trampas, indiferencia, ignominia y vejación del gobernador priista Javier Duarte de Ochoa, un pseudo político inmoral e incapaz, que se llevará como estigma el resto de su vida el asesinato de 20 periodistas durante su mandato. Datos proporcionados por la Organización Internacional “Artículo 19”.
Cómo creerle al bocón y fanfarrón Presidente Nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones, de que ahora sí (antes no, ¿verdad?) harán una elección limpia y con candidatos dignos, cómo creerle esta promesa cuando en 2012 su partido ganó el máximo cargo nacional a base de trampas, corruptelas y engaños (tarjeta Soriana, monederos electrónicos Monex), y nada pasó, todo sigue igual.
Cómo votar, cuando el PAN solapó al gobernador corruptísimo de Sonora, Guillermo Padrés Elías, a quien se le pasó la mano (más que al priista Humberto Moreira Valdés) al robar, expropiar propiedades –a su favor, desde luego- y construirse, con dinero del presupuesto del Estado, la Presa “El Titanic”, ubicada en el Rancho “Peña Negra”, de su propiedad, quitando a la población Bacanuchi, el agua del arroyo El Manzanar, afluente del Río Sonora. ¿Cómo se atreven a pedir un voto cuando en vez de gobernar o legislar, estos corruptos roban y quedan impunes?
Por qué creer que se respetará la oferta y promesa de campaña cuando en la CDMX, un sujeto sin partido, llegado a la Jefatura de Gobierno con las siglas del PRD, ha destrozado a la capital del país, además ha dañado la calidad de vida y productividad de más de 14 millones de ciudadanos, al imponerle motu proprio castigos que representan dinero para su sueño del 18, como las fotomultas, su Reglamento de Tránsito, los parquímetros, las dos verificaciones al año, el doble no circula, etc. acciones que han roto la tranquilidad y movilidad de la población.
Por todo lo anterior ¿cómo pedir a la sociedad acudir a las urnas en la Ciudad de México y en 12 estados del país, cuando no hay confianza, credibilidad, en candidatos, partidos, funcionarios públicos, electorales? que están totalmente desprestigiados, pues sólo velan por sus intereses personales, económicos, partidistas, de cuotas, cotos y cuates del tricolor, amarillos, azules.
Jamás he azuzado, promovido, instigado a no votar; nunca, jamás, pero las evidencias son contundentes: se perdió credibilidad, confianza, interés en procesos electorales cuando las e videncias son contundentes. Votamos por mejorar nuestra calidad de vida, y como respuesta nos gobierna la corrupción, impunidad, dejadez, indiferencia, desinterés… y más de los mismo.
*Miembro de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión (ANPERT)