Tras las recientes lluvias registradas en la zona serrana de la zona sur del estado de Sinaloa (de las cuales se tiene un registro acumulado de 182 milímetros durante el mes de julio) la presa de almacenamiento Picachos ha recibido en los últimos días, escurrimientos que han incrementado su nivel de almacenamiento.
Por ello, a partir del viernes 31 de julio se iniciaron maniobras para el control de avenidas mediante el derrame por vertedor, informó Félix Díaz, Director General del Organismo de Cuenca Pacífico Norte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Explicó que el diseño de la presa Picachos fue realizado con fines de riego, abastecimiento a zonas urbanas y control de avenidas mediante derrames libres por su vertedor, por lo que su funcionamiento se lleva a cabo en condiciones normales, de acuerdo a su propósito.
El funcionario federal especificó que el río Presidio tiene una capacidad máxima de conducción de entre 1,500 y 2,000 metros cúbicos por segundo (m3/s) y actualmente la presa Picachos vierte un caudal de 353 m3/s, por lo que no representa riesgo para las localidades aledañas. Sin embargo, llamó a la población a tomar precauciones, a evitar el cruce de arroyos y a no circular sobre las márgenes del río Presidio.
Félix Díaz, destacó que el personal de la Conagua realiza un monitoreo permanente de la evolución de la presa, especialmente durante la presente temporada de lluvias, así como de su seguridad hidrológica y estructural.
En caso de que se presente alguna eventualidad que implique riesgo para la población, se realizaría el aviso correspondiente, por lo que solicitó dar seguimiento a los avisos de la Conagua, a través del Servicio Meteorológico Nacional, así como a los emitidos por Protección Civil municipal y estatal.