LOS ANIMALES INFECTADOS POR CORONAVIRUS NO REPRESENTAN PELIGRO PARA LAS PERSONAS: ROSA ELENA SARMIENTO

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La profesora de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), aseguró que no hay evidencia que sugiera un riesgo de transmisión del SARS-CoV-2 de animales de producción o de compañía hacia el humano.
La profesora de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), aseguró que no hay evidencia que sugiera un riesgo de transmisión del SARS-CoV-2 de animales de producción o de compañía hacia el humano.

A partir de una analogía con la novela Rebelión en la granja de George Orwell, la doctora Rosa Elena Sarmiento se refirió a los patógenos que afectan la salud de animales de producción y domésticos, y a las implicaciones que esto tiene en la industria porcina y bovina durante la conferencia Coronavirus en la granja, transmitida en vivo por El Colegio Nacional el 18 de septiembre.

Durante su participación en la sesión que forma parte del ciclo Viernes viral, coordinado por el colegiado Antonio Lazcano, la profesora de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), aseguró que no hay evidencia que sugiera un riesgo de transmisión del SARS-CoV-2 de animales de producción o de compañía hacia el humano. También “se sabe que los coronavirus que infectan a estas especies no representan un problema o un peligro para las personas”.

En palabras de la experta en bacteriología veterinaria, actualmente no hay datos de infección de SARS-CoV-2 en animales de granja, los estudios que se hicieron en gatos, perros y hurones reportaron que estas especies pueden ser susceptibles al coronavirus, pero sólo porque fueron utilizadas como modelos experimentales.

“Es cierto que en algunos perros se encontró la presencia del genoma viral del SARS-CoV-2, pero son un número muy pequeño de casos, no es muy clara la transmisión y no se ha documentado que el perro pueda contagiar el virus a los humanos. Todavía tenemos mucho que estudiar en este campo. En realidad, no estamos familiarizados con el tema de los coronavirus presentes en nuestras vidas cotidianas”.

La profesora de la UNAM asegura que para comprender la presencia de estos patógenos es necesario conocer la familia coronaviridae, que se divide en Letovirinae Orthocoronavinae, es en esta subfamilia en la que se encuentran los cuatro géneros de coronavirus presentes en los animales de granja: los Alfacoronavirus y Betacoronavirus, que infectan principalmente a mamíferos; los Gamacoronavirus que afectan a las aves; y los Deltacoronavirus que, además de aves, infectan a cerdos.

Como en el libro de Orwell los cerdos juegan un papel principal, la doctora Sarmiento se centró en esta especie. Hizo énfasis en que se tienen tres géneros de coronavirus porcinos: Alphacoronavirus, con una mortalidad del 100% en lechones; Betacoronavirus con la misma letalidad y Deltacoronavirus, que se identificó a partir de 2017 y es mortal en un 40% de los infectados.

En su laboratorio, en la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UNAM, la bacterióloga se dedica a estudiar el virus de la diarrea epidémica porcina, enfermedad aguda que pertenece al grupo de los Alphacoronavirus y tiene alta tasa de mortalidad en lechones. Fue reportada por primera vez en 1971 y se logró aislar a partir de un brote en Bélgica, en 1976, desde entonces es un patógeno de gran impacto en países asiáticos donde la industria porcina es altamente desarrollada.

En 2013 llegó al continente americano, principalmente a Estados Unidos, Canadá y México. A consecuencia de este brote, Norteamérica reportó en ese año pérdidas económicas de un 7% de la producción total de cerdos; en México incrementó el costo de la carne de ganado en pie por peso o por tonelada, y un estudio de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación  (SAGARPA), mostró que murieron más de 60 mil lechones en cuatro granjas, lo que representó una pérdida de más de 18 millones de pesos.

Sarmiento también se refirió a la patogenia de este virus “se transmite por la ruta fecal-oral, tiene un periodo de incubación de 1 a 5 días, produce diarrea acuosa y deshidratación severa que lleva a la muerte a los animales infectados. Los lechones se contagian al nacer una vez que tienen contacto con las heces de la madre que son positivas y su muerte puede ocurrir pocas horas después del nacimiento”.

De acuerdo con la investigadora, el genoma de esta enfermedad ha sido detectado en muestras extraintestinales y se ha identificado en pulmón y riñón.  Algo parecido a lo que ocurre con SARS-CoV-2 en los humanos. “En 2010 se reportó en Asia el genotipo 2 de la diarrea epidémica porcina, que es más virulento, aunque existen vacunas para tratarla, éstas están elaboradas con las cepas conocidas”.

La mortalidad de este tipo de coronavirus en cerdos depende de la edad en la que se presente la infección, en animales de un día el cuadro clínico es severo, en los porcinos de 10 a 30 días los signos se incrementan, y en los cerdos de tres semanas la duración de los padecimientos es de hasta 10 días.

En febrero de 2017 se identificaron brotes de diarreas graves en lechones lactantes en la provincia de Guangdong, China. “Originalmente se creyó que se trataba del virus de diarrea epidémica porcina, pero fue identificado como un nuevo patógeno de cerdos al que llamaron SADS-CoV, que tiene su antecedente en un virus en murciélagos.

“Por fortuna las medidas sanitarias de contención en aduanas han impedido que este nuevo coronavirus porcino llegue a México, pero no olvidemos que en el caso de la diarrea epidémica porcina pasaron cuarenta años antes de tocar tierra americana”, puntualizó la bacterióloga mexicana.

Agregó que en las granjas de traspatio se pueden encontrar, además de cerdos, animales como caballos, gatos, perros y ratones y existe un tipo de coronavirus para cada uno de ellos.

Las enfermedades por coronavirus en perros, por ejemplo, están asociadas a dos virus: el Alfacornavirus canino, que produce un padecimiento gastrointestinal e infecta a perros de todas las edades, pero son los cachorros de menos de 6 semanas los más susceptibles. Sus principales signos son fiebre, diarrea y dolor abdominal.

Y el Betacoronavirus canino que produce una enfermedad respiratoria. Se detectó por primera vez en Reino Unido y su posible ruta de transmisión es fecal-oral, el origen evolutivo aún no es claro, aunque estudios sugieren que este coronavirus, que también afecta el sistema gastrointestinal, se pudo haber transmitido del ganado a los perros.

 Rosa Elena Sarmiento enfatizó que no se ha documentado que las personas se contagien de coronavirus de animales de granja por consumir su carne. “En el libro de Orwell el enemigo a vencer eran los seres humanos, en la historia actual el villano es el SARS-CoV-2”.

La conferencia Coronavirus en la granja se encuentra disponible en la página de YouTube de El Colegio Nacional: elcolegionacionalmx.