RECONOCEN RELEVANCIA DE LA EDUCACIÓN Y SALUD CON ÉNFASIS EN LA MENSTRUACIÓN

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, la Secretaría de la Mujer realizó la conferencia “Menstruación, educación y salud: la menstruación más allá del tabú”, en la que se analizaron los principales mitos del tema para la transformación de los saberes adquiridos.
, la Secretaría de la Mujer realizó la conferencia “Menstruación, educación y salud: la menstruación más allá del tabú”, en la que se analizaron los principales mitos del tema para la transformación de los saberes adquiridos.

En el marco de las actividades del Día Internacional de la Higiene Menstrual, la Secretaría de la Mujer realizó la conferencia “Menstruación, educación y salud: la menstruación más allá del tabú”, en la que se analizaron los principales mitos del tema para la transformación de los saberes adquiridos.

Durante la sesión virtual, hablaron de las limitantes en torno al conocimiento pleno de la menstruación, entre ellas las narrativas negativas y condenatorias más usuales, la desinformación o tabúes transmitidos, así como la simple vivencia sin acompañamiento de información.

El abordaje de los mitos que conllevan la menstruación permite situarla como un proceso asociado directamente a la salud y a su vez, desprivatizarla e incorporarla como un tema de educación que abonará a la transición de pensamientos que la asociaban con la contaminación, lo prohibido y la secrecía.

En ese sentido, se extendió una invitación para tratar este tema de salud como primordial y necesario con las nuevas generaciones, para que la información no llegue limitada ni sesgada, como pasaba antes, y les permita generar vivencias positivas.

Algunos elementos clave para lograr el cambio en el antiguo discurso son las narrativas positivas, el nombramiento y conocimiento del cuerpo propio, la menstruación como medida de salud, el conocimiento sobre opciones de gestión menstrual y la valoración de la experiencia corporal más allá de la reproducción.

Las participantes coincidieron en que, vivir una menstruación digna es un derecho humano que se ha negado; en México las personas menstruantes deben pagar los productos de gestión menstrual a precios mucho más altos porque tienen el 16 por ciento de impuesto al valor agregado pues no son considerados de primera necesidad.

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación de Empleo (ENOE), hasta el último trimestre del 2020, sólo el 42.4 por ciento de las mujeres de 15 años o más tenían participación económica.

Finalmente, concluyeron con una reflexión en torno al apoyo que debe brindarse a las generaciones de niñas, adolescentes y mujeres, para que su vivencia de la menstruación no sea complicada, de miedo o negada, sino que acepten los procesos de su cuerpo y aprendan a sentirse cómodas habitándolo.