Investigadores de la UAEM realizan estudios morfológicos del tejocote  

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·         El fruto, la raíz y las hojas del tejocotero se han empleado tradicionalmente para aliviar diversas enfermedades humanas, entre ellas, padecimientos del corazón, del sistema respiratorio y del urinario; tanto sus frutos como sus flores presentan constituyentes con potencialidad antioxidante, como los ácidos epicatequino y clorogénico.

 El Estado de México es uno de los tres principales productores de tejocote a nivel nacional, porque cuenta con una vasta región con zonas templadas, las cuales  han sido sugeridas como reserva de amplia variabilidad genética para este fruto, señalaron especialistas del Centro de Investigación y Estudios Avanzados en Fitomejoramiento de la Universidad Autónoma del Estado de México.

            Omar Franco Mora, Sara Aguirre Ortega, Edgar Jesús Morales Rosales, Andrés González Huerta y Francisco Gutiérrez Rodríguez, profesores e investigadores de la Facultad de Ciencias Agrícolas de la UAEM llevaron a cabo una caracterización morfológica y bioquímica de frutos de tejocote (Crataegus mexicana) en los municipios de Lerma y Ocoyoacac.

            Los universitarios indicaron que se trata de una fruta muy apreciada, sobre todo en épocas navideñas, debido a su empleo en la elaboración del ponche, bebida tradicional asociada con las posadas mexicanas. La importancia del tejocote radica en su riqueza en Vitamina C, carotenos y sales minerales, entre ellas, el calcio, fósforo e hierro, así como su alto contenido de pectina.

Además, el fruto, la raíz y las hojas del tejocotero se han empleado tradicionalmente para aliviar diversas enfermedades humanas, entre ellas, padecimientos del corazón, del sistema respiratorio y del urinario; tanto sus frutos como sus flores presentan constituyentes con potencialidad antioxidante, como los ácidos epicatequino y clorogénico.

Ante ello y con el objetivo de contribuir a la descripción de frutos del tejocotero en el valle alto y región montañosa de los municipios de Ocoyoacac y Lerma, Estado de México, los expertos universitarios caracterizaron frutos de esta especie, tanto morfológica como bioquímicamente, dentro de los laboratorios de la Facultad de Ciencias Agrícolas de la UAEM, así como en trabajo de campo.

 La caracterización incluyó peso y tamaño de fruto, porcentaje de pulpa y características del endocarpio, además de contenido de azúcares totales, compuestos fenólicos, acidez ti, y pH.

Esta información, indicaron los investigadores universitarios, permitirá continuar con trabajos intensivos para ofertas específicas de frutos de este género, entre ellas, su utilización en fresco y agroindustrialización en el Valle de Toluca.