Las elecciones intermedias en Estados Unidos (EU) muestran que el trumpismo está presente como movimiento y se ha apoderado del Partido Republicano, lo cual resulta desfavorable para el futuro inmediato de México por la dureza de su posición en mateira migratoria, expresó la doctora Laura Del Alizal Arriaga, investigadora de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
“Ya los vimos en la gestión de Donald Trump, cuya solución fue que los migrantes se quedaran en México; para los republicanos no hay búsqueda de soluciones, sino imposición a otros países de las obligaciones que su gobierno debiera remediar”, enfatizó.
Si bien con el presidente Joe Biden las medidas migratorias son completamente distintas, tampoco se ha registrado algún avance significativo.
El segundo día en el cargo suscribió el fin del programa Quédate en México, pero el Poder Judicial se lo revirtió, ya que hay fuerzas en el vecino país que se oponen a salidas negociadas y menos brutales, por lo que “en este apartado tendremos conflictos si se confirma la mayoría republicana en la Cámara de Representantes”.
Como consecuencia de las elecciones, la académica evaluó que en torno al Tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (TMEC), no sólo los republicanos, sino también los demócratas presionarán para el cumplimiento de las obligaciones pactadas en el acuerdo, por lo que “nos acercamos a una situación muy difícil, por la falta de una negociación seria de parte del gobierno mexicano sobre las demandas de los estadounidenses”.
En el peor de los escenarios si llegara a ganar Trump las elecciones presidenciales en 2024, para 2026 –cuando se discuta la continuidad del TMEC– el acuerdo podría desaparecer, planteó la especialista en relaciones internacionales.
En entrevista, la profesora del Departamento de Sociología de la Unidad Iztapalapa consideró que el resultado de las elecciones intermedias es un buen signo, en virtud de que los republicanos no se impusieron tan fácilmente como se pensaba, pues se pronosticaba que iban a arrollar, tanto en las gubernaturas, como en el Senado y la Cámara de Representantes.
“Ha sido una elección muy reñida que demuestra que los demócratas no están completamente en el suelo y que están dando la lucha”, apuntó.
Sin embargo, quedan por definirse muchos resultados, si bien en la Cámara de Representantes muy probablemente los republicanos logren la mayoría, todo parece indicar que los demócratas mantendrán la mayoría en el Senado.
“Las elecciones hablan de la polarización del electorado estadounidense, que sigue habiendo una fuerte competencia entre ambos partidos y que asuntos relevantes para la vida de esa nación se debaten fuertemente”.
Otro dato interesante es la alta participación del electorado, que demuestra que los ciudadanos se están ocupando de lo que ocurre políticamente en su país. “Sin duda es una buena noticia, que la gente se mueva y defienda su punto de vista”, planteó la especialista en temas internacionales y globalización.
Por el lado republicano, el triunfo por más de 20 puntos porcentuales de Ron DeSantis para reelegirse como gobernador de Florida habla de un apoyo abrumador, de más de 60 por ciento de los sufragios, a un hombre conservador, que puede ser considerado ya como para las elecciones primarias del Partido Republicano de cara a la elección presidencial de 2024.
Frente a esa situación, la respuesta inmediata de Trump fue agresiva contra el gobernador, “dijo que sabía muchas cosas y que las iba a ventilar para impedir que llegara a la candidatura republicana, pues lo ve como una clara amenaza a sus aspiraciones de volverse a postular para el proceso de 2024 y el expresidente va a intentar ganar la nominación muy a su estilo”, consideró Del Alizal Arriaga.
Los triunfos electorales de los candidatos que apoyó el expresidente representan un gran impulso para su nominación, aunque independientemente de si se presentara como candidato, el trumpismo se ha estado fortaleciendo.
“Espero que en la disputa por Arizona no resulte ganadora la candidata republicana, pues enarbola una postura abiertamente antiinmigrante. El fortalecimiento del movimiento que inició Trump debe preocuparnos a los mexicanos”, sostuvo.
Para la investigadora, con Trump o sin él los republicanos representan una corriente política de derecha con objetivos antidemocráticos para revertir lo avanzado desde los años setenta del siglo pasado.
“Frente a esto no veo estructurada la propuesta del partido demócrata, el presidente Biden es una persona de edad avanzada y hay dudas en su propio partido de si tiene la fortaleza física y mental para seguir ocupando la presidencia por otro periodo”.
Tampoco se percibe en el partido demócrata un candidato que pudiera ser competitivo para la presidencia. Kamala Harris no se consolidó como esa candidata, es de muy bajo perfil, “y vemos que los grandes líderes del partido son de edad avanzada, como Nancy Pelosi, quien es una excelente coordinadora en el Senado por los demócratas, pero ya tiene 82 años”.
El senador Bernie Sanders, con posturas muy extremas y pocas posibilidades reales de ganar, también tiene más de 80 años, situación que confirma que en el Partido Demócrata no han aparecido líderes jóvenes que pudieran presentar una respuesta al espectro político de aquel país que se ha derechizado, concluyó la investigadora de la Casa abierta al tiempo.
