Denuncian negligencia médica en la Clínica de la Mujer Reina Madre

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-Amenazaron a la madre de no atender a la bebé si no paga

Durante la labor de parto de una paciente, los médicos de la Clínica de la Mujer, Reina Madre, le dijeron que la bebé no respiró al nacer, además le mencionaron que son riesgos que pasan.

Ante esta situación Ricardo Rodríguez Núñez, director de la clínica, amenazó a la madre de la pequeña, diciéndole que si no paga, se le empezará a negar los servicios a la bebé, quien en este momento se encuentra muy delicada con oxígeno y recibiendo otros medicamentos, por lo que la madre decidió interponer ante la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) una denuncia por negligencia médica.

Por lo delicado del tema, la mamá prefiere mantenerse en el anonimato para que la pequeña y ella no tengan represalias, dijo en entrevista.

Además, espera que la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (CODHEM) pueda ayudarla, así como la Comisión para la Protección contra Registros Sanitarios del Estado de México (COPRISEM), verifique la situación del lugar.

En la FGJEM ya se hizo la denuncia con Carpeta de Investigación TOL/TOL/CSD/107/002695/23/01.

Se destacó que la madre estuvo por aproximadamente 16 horas en labor de parto, esto debido a que la doctora se encontraba de guardia toda la noche hasta que la bebé nació, por lo cual no había dormido.

Dijo la mamá de la pequeña: “Ingrese el 29 de diciembre, aproximadamente a las 22:20 horas, a la Clínica Reina Madre, ubicada en Avenida Paseo Tollocan 402, Residencial Colón, Colonia Ciprés, en el municipio de Toluca, tras una consulta previa en la sucursal de Metepec, en donde la Doctora Mariela García Sandoval, quien ese día se encontraba de guardia me indicó que ya me induciría el trabajo de parto, me interné y una de las indicaciones que dio es que me bañaran con agua caliente, lo cual no fue así, solo había agua fría, luego por un descuido de ella, en uno de los tactos que me realizó me rompió la fuente, a lo cual ella dijo “hay no, era justo lo que no quería”, por lo cual le pregunté que si no había riesgo y me dijo que no.

Denunció que después de horas que ya llevaba con los medicamentos para inducirle el parto, le dio vómito y no había un lugar para que pudiera vomitar, por lo cual su papá tomó una bata para que pudiera hacerlo en ella; no solo ello, dijo que en ningún momento le cambiaron las sábanas, ni cuando se rompió la fuente ni cuando vomitó.

La internada comentó que su padre siempre estuvo presente con ella y que es testigo de todos estos acontecimientos, agregó que ya empezaba a tener más dolores, por lo que solicitó a la doctora que fuera por cesárea y no por parto normal, pero esta le indicó que no había quirófanos disponibles, que se tenía que esperar, así eran las cosas en ese Hospital, que solo le podía ofrecer calmar el dolor con anestesia.