Espléndido, desorganizado y amante de la familia. El turista mexicano es un hedonista nato. Le encantan los destinos de playa pero también privilegia destinos fuera de lo común que enriquezcan sus sentidos y experiencia de vida.
Pasión por viajes by Descuento en Viajes, la agencia turística que realizó un estudio sobre costumbres en los turistas de 25 economías, dice que al mexicano le gusta viajar con su familia, es espléndido en las propinas de restaurantes pero no en servicios. A diferencia de los turistas de Europa, por ejemplo, al mexicano no le gusta programar minuciosamente sus vacaciones.
De acuerdo a la agencia, lo primero que empaca el turista nacional son sus tarjetas de crédito, teléfono celular y cámara fotográfica. Lo que más olvida es el cepillo dental y la dieta. En promedio incrementa 2.3 kilogramos durante sus vacaciones decembrinas porque la comida es parte de la fiesta para él.
En México el 92.72% del turismo es nacional y durante época decembrina representa 10.2 millones de visitantes que en 98% de los casos viajan en familia y el 35% visitan los centros de playa. Sin embargo, “en los últimos dos años vemos un incremento a destinos culturales como Chiapas o Chihuahua”, comenta Alfredo Vázquez, director de la agencia que realizó el estudio.
Sólo el 26% de los turistas mexicanos viaja con amigos, el 33% con su pareja y el 5% solo. Las vacaciones de diciembre a diferentes ciudades lo hacen para visitar a familiares que residen en el interior del país en 68% de los casos, pero si se trata de disfrutar, nuestros connacionales prefieren destinos de playa.
Durante las vacaciones de Semana Santa aparece un nuevo fenómeno: los turistas mexicanos buscan sitios que les brinden múltiples paisajes, heterogénea gastronomía y posibilidad de practicar deportes extremos. Mexicanos mayores de 45 años, en cambio, privilegian sitios culturales como Chiapas durante las vacaciones febrero-marzo.
20.35 millones de mexicanos, que representan las clases socioeconómicas A, B y C+, realizan en promedio 2.2 viajes al año y el 85% de ellos lo hacen a destinos nacionales. El 25% a Cancún, seguido de Acapulco en 24% y en tercer lugar optan por Puerto Vallarta (14%). Sin embargo, existen destinos que crecerán mucho en los próximos años por factores sociodemográficos como el incremento de adultos mayores que privilegian el turismo cultural y los ambientes seguros.
“En México las recomendaciones de amigos y familiares son muy importantes para elegir sitios de vacaciones e incluso resorts. Estas opiniones ahora son más factibles a través de comentarios en las redes sociales y sitios especializados de Internet como TripAdvisor” refiere el directivo de Pasión por viajes by Descuento en Viajes
En México una de las actividades que se consideran más “relajantes” y “placenteras” son viajar.
“En México viajar es la principal actividad relacionada con la diversión y el disfrute seguida de fiestas y paseos. Incluso campañas para incentivar el ahorro determinan que la posibilidad de viajar es uno de los principales alicientes” dice Alfredo Vázquez.
Sorprende, asi mismo, que “el turista mexicano no suele planear minuciosamente sus vacaciones. El 66% no reserva con antelación vuelos y hospedajes, por lo que no logra ahorros significativos o ventajas como mejores lugares, regalos promocionales y otros. Tiene un gran sentido de improvisación y aventura”, dice el directivo.
Asimismo, el 57% de los viajeros nacionales rebasan su presupuesto en 14% en promedio porque no contemplan todos los gastos a generar. “El 47% de los viajeros nacionales de las clases socioeconómicas A, B y C+ no opta por opciones todo incluido, tampoco suele aprovechar los servicios de una agencia de viajes que podrían preveer cualquier imprevisto”, refiere Vázquez.
Para enfrentar los gastos de viaje se opta por viajar con todas las tarjetas de crédito y sólo el 18% de los turistas nacionales llevan una bitácora completa de gastos. Esto, de acuerdo al experto, genera un alto riesgo al viajar, porque se gasta más de lo planeado, se corren riesgos de clonación de tarjetas o robo.
Finalmente, es común que los viajeros mexicanos rompan su dieta durante los periodos vacacionales. “Muchas veces optan por comida rápida, alta en azúcares y carbohidratos. Esto se puede minimizar si se tiene una amplia oferta gastronómica”.