“Hoy puedo volver a vivir gracias al trasplante que me devolvió la salud y la esperanza”, expresó Enedina Solís Jiménez, derechohabiente del ISSSTE, quien hace ocho años recibió un trasplante de corazón en el Centro Médico Nacional ‘20 de Noviembre’. En el marco del Día Mundial del Paciente Trasplantado, el instituto destaca este caso como ejemplo del impacto positivo de la donación de órganos en México.
Originaria de Naucalpan de Juárez, Estado de México, Enedina fue diagnosticada con miocardiopatía dilatada idiopática, un padecimiento que debilitó su corazón al grado de imposibilitarla para realizar actividades básicas como caminar, dormir o convivir con su hija. Su condición fue atendida por el equipo médico encabezado por la cirujana cardiovascular María del Sol García Ortegón, la primera mujer en México y Latinoamérica en realizar un trasplante de corazón.
“El trasplante duró entre cuatro y cinco horas, con una recuperación de 31 días. Fue un proceso doloroso, pero necesario. Desde entonces he tenido una vida más plena, con dieta adecuada, medicamentos inmunosupresores y acompañamiento médico constante”, compartió Solís Jiménez. Agradeció al equipo médico del ISSSTE, en especial a la doctora García Ortegón, así como a la familia del donante, por el acto de generosidad que le dio una nueva oportunidad.
Por su parte, el director general del ISSSTE, Martí Batres Guadarrama, reiteró el compromiso del instituto en brindar atención médica especializada de alta calidad, reconociendo a los pacientes trasplantados como símbolos de lucha y esperanza.
El ISSSTE recordó la importancia de la donación de órganos y llamó a quienes deseen ser donantes voluntarios a registrarse en el Centro Nacional de Trasplantes (Cenatra).