La fuerza de las lluvias abrió la tierra, pero la coordinación entre instituciones la volvió a unir. En menos de 48 horas, la carretera federal 307 —que enlaza a Chiapas con Guatemala— fue reabierta al tránsito, luego de que un socavón de casi 10 metros colapsara el paso a la altura del Ejido Nuevo Chihuahua, en el tramo Benemérito–Trinitaria.
El incidente, ocurrido el 9 de octubre, dejó incomunicadas a seis comunidades rurales. Desde esa misma noche se activó el Plan DN-III-E, bajo la dirección del Ejército Mexicano, en colaboración con la Guardia Estatal Preventiva “Fuerza Pakal”, la Protección Civil Municipal y el Ayuntamiento de Benemérito de las Américas, encabezado por Juan Gómez Morales.
Una labor bajo la lluvia
Durante dos jornadas ininterrumpidas, más de 100 elementos del Ejército y personal municipal trabajaron con palas, picos, sogas, retroexcavadoras y volquetes para retirar escombros y rellenar el socavón con grava y material pétreo, garantizando el paso provisional de vehículos.
Bajo la lluvia, se instaló alumbrado provisional para continuar las tareas nocturnas, mientras la policía y Protección Civil controlaban el tránsito y mantenían la seguridad en la zona.
Fue una acción sin descanso, con el compromiso de no dejar aisladas a nuestras comunidades”, expresó el alcalde Gómez Morales, al agradecer la rápida intervención de las fuerzas armadas.