La Comisión de Desarrollo Social analiza un punto de acuerdo para exhortar a la Secretaría de Gobernación (Segob) y a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) a que establezcan protocolos para atender a personas que viven en situación de calle, respetando y vigilando sus derechos.
Se prevé solicitar a las secretarías de Desarrollo Social federal y estatales realizar un censo nacional de las personas que viven en esta condición para poder atender sus necesidades e identificar los factores que inciden en su problemática.
La propuesta impulsada por el diputado Felipe Reyes Álvarez (PRD), precisa que uno de los temas pendientes a resolver en México es el relacionado con esta población, sobre todo cuando en los últimos años el número ha aumentado, “al grado de que los registros son mayores a los que en promedio tiene América Latina y el Caribe”.
Menciona que en el país no existen estadísticas claras sobre la cantidad de personas que viven en esa situación. Tampoco hay indicadores que permitan cuantificar a la población callejera, ya que las estadísticas de pobreza en México, realizadas por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) se basan solo en estudios de hogares realizados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), “Panorama social de América Latina 2015”, revela que hasta 2011, 36.3 por ciento de mexicanos vivían en pobreza, casi siete puntos porcentuales más respecto al 29.4 por ciento de la población latinoamericana que se encontraban en igual condición.
Además, los mexicanos en situación de calle representan 13.3 por ciento de la población total, cuando la media latinoamericana fue de 11.5 por ciento. La pobreza en México avanzó de 51.6 por ciento de la población en 2012 a 53.2 por ciento en 2014, mientras que la indigencia creció de 0.6 a 20.6 por ciento.
Reyes Álvarez puntualiza que de acuerdo con un documento del Instituto de Asistencia e Integración Social (Iasis), tan solo en la Ciudad de México hay 6 mil 754 personas en situación de calle. De ellas, 4 mil 354 (64 por ciento) se ubicaron en el espacio público y 2 mil 400 (36 por ciento) en albergues públicos y privados. En cuanto al género, 5 mil 894 (87.27 por ciento) son hombres y 860 (2.73 por ciento) son mujeres.
En junio del 2017, se realizó la Segunda Encuesta sobre Discriminación en la Ciudad de México, donde las poblaciones callejeras ocupan el octavo lugar entre los sectores sociales más discriminados, dejando claro que la condición que viven es precaria y adversa, convirtiéndolos en un foco de vulnerabilidad social.
En dicho estudio, ante la pregunta sobre la principal forma en que son discriminados, el maltrato, la indiferencia y el rechazo tuvieron el mayor porcentaje (82 por ciento); la respuesta de no existe igualdad para ellos, obtuvo el 12 por ciento, mientras que el 6 por ciento restante lo adjudicó a la falta de derecho a la integridad, a la libertad y a la vulnerabilidad de su seguridad personal.
Por ello, es necesario que el gobierno se comprometa a generar políticas públicas que permitan erradicar esta situación, respetando y vigilando sus derechos humanos. Además, se deben encontrar las causas que generan la situación de calle, lo que hay detrás de ello y la vulnerabilidad a sus derechos.