En los próximos días se deberán depositar 150 millones de pesos en un fideicomiso en Banjército, recurso que estará a disposición para que el equipo de transición del próximo Presidente de México a partir del 2 de julio, esto para el proceso de cambio de administración.
El objetivo de los 150 millones de pesos es cubrir los gastos de quien resulte ser el presidente electo y de su equipo de asesores que participará en la elaboración de los proyectos de Ley de Ingresos, Presupuesto de Egresos y Plan Nacional de Desarrollo, así como trabajos de enlace con la administración saliente y también la difusión de actividades.
De acuerdo con Hacienda, aunque se estimó un gasto menor, optaron por mantener la cantidad nominal aprobado para sexenios anteriores.
Los recursos que no sean usados deberán regresar a la Tesorería de la Federación para la posterior extinción del fideicomiso.
En el proceso de transición de Enrique Peña Nieto, en 2012, de los 150 millones de pesos disponibles, sólo empleó el 13 por ciento de los recursos del fondo, es decir, 20 millones 299 mil pesos, esto para cubrir nómina, materiales y suministros, servicios generales y auditoría externa.
Mientras que en 2006, Felipe Calderón utilizó 63 millones de pesos de los 150 millones disponibles, para nómina y honorarios de asesores independientes.
