Caídas de los usuarios, choques, golpes, asaltos, incluso, la muerte, son accidentes que suceden día a día en el transporte público de la Ciudad de México. Ante ello, es muy importante que cuando viajes tomes precauciones; aquí te presentamos la guía para sobrevivir en el transporte público.
Camión o microbús
Por seguridad nunca viajes como “mosca”, es decir, en las escaleras de estos transportes pues al frenar o girar para algún lado, el peso de tu cuerpo puede provocar que caigas. Recientemente, un hombre perdió la vida al caer de un microbús de la Ruta 18, entre la avenida Cuautepec y Boulevard de Temoluco, en la alcaldía de Gustavo A. Madero.
Traer cambio. Te parecerá ‘tonto’ pero evita que te nieguen el servicio por pagar con ‘un billete grande’ o que se te olvide solicitar tu cambio cuando bajes. También sal con unos minutos de anticipación, por si hay tráfico, llegues a tu destino a tiempo.
Solicita tu ascenso o descenso en los lugares pertinentes, en las paradas establecidas. Además, pon atención a la hora de bajar y subir para evitar un accidente.
Si en el área donde bajas existe una ciclovía, siempre fíjate que no venga una bicicleta o scooter para que no te atropellen.
Trata de mantener tus cosas de valor en tu mochila, no las saques en el transporte público para evitar que te las roben.
Metro
Evita un reclamo. Respeta los asientos destinados para personas con capacidades diferentes, embarazadas y personas de la tercera edad.
No te sientes en el suelo, ya que puedes provocar que los demás usuarios se caigan y lastimen.
Si el tren ya está lleno, no trates de meterte empujando a los demás pasajeros, ya que puedes lastimar a alguien; al igual que cuando viajas en microbús, sal con tiempo de anticipación.
No cruces la línea amarilla, pues si llegas a perder el equilibrio caerás en las vías. Tampoco asomes tu cabeza, ya que el tren podría golpearte y causarte una herida.