El Informe de Finanzas Públicas y Deuda Pública a febrero publicado por Hacienda el viernes muestra reducciones en el gasto neto del Gobierno y en inversión física, lo que según expertos, poco ayuda a dinamizar a la economía.
La contracción del gasto público, emparejada con la reducción en la inversión física y la política de austeridad del nuevo gobierno observadas en los dos primeros meses de 2019, podría ocasionar que la economía mexicana pierda dinamismo en el corto plazo y que se prendan los “focos amarillos” en las finanzas públicas, estimaron expertos.
La Secretaría de Hacienda publicó el viernes el Informe de Finanzas Públicas y Deuda Pública a febrero, el cual reportó que el gasto neto del gobierno fue de 897 mil 160.5 millones de pesos en enero y febrero. Esta cifra implica una reducción real de 7.7 por ciento respecto al mismo periodo de 2018.
El informe reveló que el gasto neto pagado registró un subejercicio de 76 mil 258 millones de pesos, es decir que el gobierno gastó casi ocho por ciento menos de lo que Hacienda calendarizó para los dos primeros meses del año.
Además, en el primer bimestre, el gasto de dependencias con recursos para infraestructura bajó de forma considerable. En el caso de la Sedatu la caída fue de 86.5 por ciento real, mientras que en la Secretaría de Comunicaciones y Transportes fue de 72.6 por ciento, y en la Secretaría de Salud de 35.8 por ciento.
Héctor Villarreal, director general del Centro de Investigación de Estudios Presupuestarios (CIEP), expuso que “la fotografía” que muestra Hacienda al mes de febrero retrata unas finanzas públicas apretadas que poco pueden ayudar a dinamizar la economía, además de ser el escenario que se espera persista en los próximos meses.
“Creo que las finanzas en el estado actual muy poco pueden ayudar a detonar el crecimiento porque hay muchas cosas que impulsan crecimiento como son proyectos de inversión que ahorita no tenemos. En el corto plazo, si hay menos dinero en la economía, tienes que perder dinamismo”, dijo.
Débil inversión
En términos de inversión física, el informe mostró una reducción de 5.8 por ciento anual en términos reales. Los datos de Hacienda muestran que en febrero de este año se gastaron 37 mil 906 millones de pesos, un monto que en términos absolutos es el más bajo registrado desde julio de 2008, año en que comenzó la recesión global.
“Es evidente el menor gasto y las contracciones que en febrero ya se reflejaron en la parte de inversión. Esto lo que nos marca es que las obras de infraestructura se están frenando a pesar del ambicioso programa de reactivación de inversión en el sector energético”, señaló José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico.
“Sí hay focos amarillos en la economía porque las tendencias anticipan que cerca del 70 por ciento de la actividad productiva y servicios están en franca desaceleración”, explicó.
Lenta recaudación
Por último, la meta de recaudación de Hacienda en cuanto a los ingresos presupuestarios, no se alcanzó.
Los ingresos totales presupuestarios ascendieron a 853 mil 944.7 millones de pesos entre enero y febrero de 2019.
Lo anterior implica una reducción de 3.9 por ciento real respecto al año previo, pero también significa una recaudación 3.5 por ciento menor a la prevista.
La meta fijada por la administración actual para el primer bimestre de este año era de 885 mil 085 millones de pesos, es decir, 31 mil 100 millones más de lo que captó realmente.
IVA a febrero con la mayor baja desde 2011
En los primeros dos meses del año, la administración del presidente López Obrador recaudó 165 mil 682.7 millones de pesos por Impuesto al Valor Agregado (IVA), lo que implicó una caída real de 8.2 por ciento, frente a igual lapso de 2018.
Esta reducción es la mayor para un periodo similar desde 2011, cuando los ingresos por IVA bajaron 5.1 por ciento, según datos de la Secretaría de Hacienda.
El fisco tenía proyectado recaudar 180 mil 522.6 millones de pesos, es decir, 15 mil millones de pesos más de lo efectivamente captado.
“El IVA nos preocupa porque puede ser un predictor de que el consumo de ciertos bienes no anda como quisiéramos, esto podría ser malo por actividad económica. Otra explicación de menor recaudación puede ser la aplicación de los estímulos en la frontera norte”, dijo Héctor Villarreal, director general del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria.