Los archivos PDF se han convertido en el formato preferido de los delincuentes cibernéticos para infectar la mayor cantidad de dispositivos electrónicos, con códigos maliciosos y cometer cualquier tipo de fraude en Internet.
En 2018, de acuerdo con una compañía de ciberseguridad, se registraron más de 47 mil nuevas amenazas por medio de este tipo de archivos compartidos por correo electrónico. En tanto, el mes pasado se documentaron 73 mil ataques.
Los ciberdelincuentes operan por medio de correos falsos de empresas o instituciones, donde adjuntan documentos en PDF los cuales contiene enlaces a páginas fraudulentas y códigos maliciosos escondidos.
Esta práctica conocida como phishing es una de las formas de engaño y estafa más usadas por los delincuentes cibernéticos, pues la mayoría de los programas de detección de malwares no suele reconocer el software malicioso ni los enlaces fraudulentos dentro de los archivos PDF.
Para evitar una infección con este tipo de archivos es necesario tener actualizadas las versiones que se usan para leer los archivos en dicho formato, además de no abrir correos spam o de sitios desconocidos, prestar atención al remitente del correo para determinar la legitimidad del mismo y analizar los archivos con algún indagador de ficheros PDF.
Las pérdidas generadas por el crimen cibernético en México son cuantiosas y se estimaron en 7 mil millones de dólares en 2018.
