Hace un cuarto de siglo, a solo unos meses de la entrada en vigor del entonces Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y el levamiento “zapatista”, México se convirtió en el miembro número 25 de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), llamado por algunos como “el club de los países ricos”.
El 18 de mayo de 1994, el entonces canciller mexicano Manuel Tello entregó en la sede de la OCDE en París, Francia, la ratificación del Senado de la República con la cual México se convirtió en el miembro número 25. El “Decreto de promulgación de la Declaración del Gobierno de los Estados Unidos Mexicanos sobre la aceptación de sus obligaciones como miembro de la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos” fue publicado en el Diario Oficial el 5 de julio del mismo año.
De acuerdo con el Centro de la OCDE en México para América Latina, algunos de los beneficios específicos del ingreso de México al organismo son las políticas públicas en los distintos ámbitos son contrastadas con la experiencia de las mejores prácticas en el ámbito internacional.
Además, la administración pública en México se ha visto fortalecida; distintos sectores del país también pueden hacer uso de análisis de información relevante; y la OCDE contribuye a un mejor entendimiento de algunos asuntos de políticas públicas en México.
Destaca que la participación en la OCDE ha permitido a México aprovechar las experiencias de otros países y a la vez dar a conocer mejor la economía mexicana ante los demás países miembros.
Asimismo, México ha servido como puente de comunicación entre los países industrializados y los países en desarrollo, sobre todo de la región latinoamericana, refiere la oficina de representación en el país del OCDE. México ha presidido en dos ocasiones la Reunión de Consejo a nivel Ministerial de la OCDE, la reunión más importante del año en la organización, cuyo secretario general es el mexicano José Ángel Gurría, desde junio de 2006.
La primera ocasión fue en 1999 y la segunda en 2004. Además, la OCDE ha efectuado estudios y evaluaciones de México en diversas materias y también ha realizado en el país reuniones y seminarios.
El Centro de la OCDE en México para América Latina resalta que la participación del país ha propiciado la apertura del organismo al resto del mundo, enriqueciendo sus análisis y su relevancia, y también ha contribuido al debate del desarrollo económico desde la perspectiva de una economía emergente.
En este contexto de los 25 años de la integración de México a ese organismo internacional, a principios de este mes, el secretario general de la OCDE, José Ángel Gurría Treviño, realizó una gira de trabajo por México, donde se refirió a la economía nacional y a la situación financiera de Pemex.
Sobre este último punto, el mexicano calificó de esencial resolver la debilidad financiera de Pemex, al considerar que es un riesgo que podría poner en peligro la estabilidad macroeconómica del país.
En respuesta, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que el secretario general de la OCDE carece de autoridad moral para hablar de la economía nacional, porque formó parte de los gobiernos que dejaron en bancarrota al país.