Ciberespacio, nueva plataforma para delitos como narcomenudeo

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El ciberespacio ha amplificado el comportamiento de diferentes conductas delictivas, como el narcomenudeo, que usa herramientas como la Deep Web o la Darknet, alertó el titular de la Coordinación para la Prevención de Delitos Electrónicos de la Policía Federal, Oliver González.

Las nuevas tecnologías atienden al desarrollo social y económico, pero también generan puntos que pueden ser una herramienta para personas que se dedican a delinquir, y a través de redes se generan mercados ilícitos, resaltó.

En la Deep Web, por ejemplo, se ofrecen productos y servicios ilícitos, afirmó en el marco de la inauguración de la exposición Infosecurity México, en esta ciudad.

Detalló que en el caso del narcomenudeo ha sido modificado a través del uso de tecnologías, por medio de mercados ilícitos en redes. También las criptomonedas pueden favorecer actividades como el cibercrimen y el lavado de dinero.

Oliver González destacó además el fraude y robo de identidad que afecta de manera directa la seguridad y el patrimonio de la ciudadanía.

“También está la afectación a la infraestructura crítica, a través de ataques cibernéticos como las amenazas persistentes avanzadas”.

En ese sentido, el representante de la Policía Federal alertó que México está expuesto a múltiples riesgos y amenazas, como la afectación de instalaciones estratégicas o de infraestructura crítica de información.

Para ello, subrayó, se deben fortalecer las capacidades, entre otras, el establecer un sistema nacional de inteligencia que genere productos estratégicos para la toma de decisiones en materia de seguridad nacional.

Además de actualizar el catálogo de infraestructura estratégica y mejorar las capacidades tecnológicas de investigación en seguridad pública e interior, y crear un documento único de identificación nacional con componentes biométricos.

La ciberseguridad es una responsabilidad de todos, apuntó, pues existen riesgos y vulnerabilidades.

Para atender estos factores, aseveró, se requiere de una alianza público privada fortalecida, donde diferentes actores compartan información, mejores prácticas y mecanismos de colaboración.

Además de que la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana encabeza una campaña para empoderar a la ciudadanía en este tema.