El presidente Andrés Manuel López Obrador dejó en manos de la oposición la decisión de elegir el día, en 2021, de la votación de la consulta de revocación de mandato.
“Si no aceptan lo del 21 (de marzo de 2021), que se vean otras opciones, pero que sí haya revocación”, dijo y propuso que también se evalúe a gobernadores y otros funcionarios.
El mandatario pidió a la oposición no tenerle miedo a las elecciones, pues eso legitima a las autoridades de cualquier nivel de gobierno.
Sostuvo que si no se quiere hacer la revocación de mandato en marzo o en junio, el día de las elecciones intermedias, “se podría ver otra fecha”.
La única condición que solicitó es que no haya un gasto adicional, porque para llevar a cabo una consulta puede ser relativamente fácil, pues a decir del Presidente nada más se convocaría a la gente un domingo para preguntarles: “¿Quieres que continúe el presidente o que renuncie?. Sí o no. Que continúe o que renuncie”.
Consideró necesario perfeccionar la iniciativa que se discute en el Congreso, pero respetando la esencia, porque de lo que se trata es que el pueblo siempre tenga las riendas del poder en sus manos.
Es decir, agregó López Obrador, que no salgan por ahí los que sólo buscan llegar a los cargos públicos a costa de lo que sea, sin escrúpulos morales, los arribistas, los ambiciosos, vulgares, los que les importa el poder por el poder.
“Que no se sientan ya seguros; que digan ‘ya gané y ahora me van a aguantar seis años porque es legal, no me pueden mover’. No. De acuerdo a la Constitución, el pueblo tiene en todo momento el derecho de cambiar la forma de su gobierno, es un principio democrático, que no se aplica”, dijo.
En tanto, las dirigencias del PAN, PRI, PRD y MC insistieron en que la consulta sobre revocación de mandato se realice en diciembre de 2021 y no coincida con la elección intermedia.
La presidenta nacional del PRI, Claudia Ruiz Massieu, aseguró que sus legisladores no irán con una revocación de mandato que parece más “una ratificación de mandato”.
“La revocación de mandato es un instrumento ciudadano de control sobre los Poderes Ejecutivos. Sí apoyaríamos una revocación de mandato que se pueda plantear desde la ciudadanía a partir del 1 de diciembre de 2021”, enfatizó.
En tanto, Marko Cortés, presidente nacional del PAN, alertó del debilitamiento de las instituciones ante la propuesta del Presidente.
“Estamos preocupados ante cualquier intento de debilitar instituciones, de debilitar contrapesos. Ante el intento del uso del poder para generar clientelas y ante cualquier intento burdo y absurdo del titular del Poder Ejecutivo de querer ir a la boleta electoral”, aseguró en una conferencia conjunta realizada en la Cámara de Diputados.
A nombre de los cuatro partidos pidió a los senadores retirar “de manera definitiva” el dictamen de reforma constitucional que pretendían votar esta semana.
“Hablemos de la figura, sí y sólo sí, después de la mitad de su mandato; sí y sólo sí, a petición de la sociedad o de los partidos de oposición en México”, dijo.