La Corte Suprema permitirá la aplicación a nivel nacional de unas nuevas restricciones del gobierno del presidente Donald Trump que evitan que la mayoría de los migrantes centroamericanos soliciten asilo en Estados Unidos.
La orden de los magistrados anula temporalmente un fallo de una corte de menor instancia que había bloqueado la nueva política de asilo en algunos estados ubicados en la frontera sur del país. La política está dirigida a negar el asilo a cualquier persona que pase por otro país durante su viaje hacia Estados Unidos sin buscar protección allí.
Gran parte de las personas que cruzan la frontera sur son centroamericanos que huyen de la violencia y la pobreza. De acuerdo con la nueva norma, la mayoría de ellos no pueden aspirar a solicitar asilo.
Los magistrados Ruth Bader Ginsburg y Sonia Sotomayor expresaron su desacuerdo con la orden del máximo tribunal. Sotomayor señaló que la regla anula “las prácticas de larga data con respecto a los refugiados que buscan resguardarse de la persecución”.