El presidente de la Comisión de Asuntos Frontera Sur, Raúl Eduardo Bonifaz Moedano (Morena), presentó una ficha técnica que contiene los resultados de las opiniones e información de los foros realizados a través del parlamento abierto sobre la consulta y el impacto que generaría en la sociedad el proyecto del Tren Maya.
En el foro “Legislativo-Académico de la Frontera Sur: el Tren Maya”, mencionó que para la Cámara de Diputados reviste una importancia fundamental, ya que se llegó a la conclusión de un trabajo de análisis relacionado con este proyecto que busca el impulso en la frontera sur.
Refirió que en marzo inició un recorrido por los estados de Campeche, Yucatán, Tabasco, Chiapas y Quintana Roo en donde participaron El Colegio de la Frontera Sur, el Conacyt, investigadores y profesores de universidades de cada una de las entidades por donde atravesará el Tren Maya.
“Muchos cuestionamientos surgieron y la información analizada nos llamó la atención por la diversidad de temas que conlleva la implementación de esta propuesta; el tratamiento del agua, la producción y sus tendencias, comercialización, transporte, pueblos autóctonos, educación, salud, enfermedades, en fin, un universo muy complejo que incluye todas las áreas de actividad y el necesario cuidado de la naturaleza, la flora y fauna”.
Expresó que hay expectativas de que habrá un espacio de desarrollo regional y que en un futuro la frontera sur tenga la oportunidad de crecimiento y bienestar que ha sido una búsqueda constante de la sociedad para su transformación.
La vicepresidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Dulce María Sauri Riancho (PRI), indicó que si bien es importante el desarrollo del sur-sureste ante los rezagos que vive, es fundamental hacer un estudio de mercado. “Ese es un tema delicado para darle certidumbre al proyecto, a fin de garantizar rentabilidad y, con ello, inversión privada o sólo será del gobierno”.
El financiamiento, afirmó, es un asunto de especial cuidado. “Hoy se tiene una oportunidad de hacer un buen plan”. Además, expuso que están proyectadas entre 15 y 18 terminales para los cinco estados, pero Chiapas y Tabasco tienen solamente una.
Sauri Riancho aseveró que en Yucatán se vislumbra que el ferrocarril no sea para carga, sino sólo para pasajeros; por ello, abundó, se requiere analizar el precio del boleto a efecto de competir con el transporte público terrestre. Llamó a contemplar los riesgos que podría haber para la población debido a la cercanía con los centros urbanos.
La diputada María Ester Alonzo Morales (PRI) señaló que se ha trabajado con diversos centros de estudios de la Riviera Maya con el objetivo de analizar los impactos negativos que podría traer y surgieron propuestas como: contemplar medidas de mitigación del ruido que se emitirá en la construcción; estudios de escurrimiento hidrológico; regular los pasos de la fauna y realizar programas para impulsar proyectos sustentables en la zona.
Carlos Enrique Martínez Aké, diputado de Morena, dijo que es palpable el enorme rezago económico que se vive en el sur-sureste del país y el Tren Maya reviste una importancia fundamental para reducir la brecha de desarrollo entre el norte y el sur de México. El proyecto “impacta todas las aristas de la vida pública, el económico, ambiental, de desarrollo urbano ordenado, pero particularmente el de las comunidades indígenas, a las cuales se deben cuidar, escuchar y respetar”.
Por el PAN, el diputado Carlos Carreón Mejía destacó que los pueblos mayas del sureste mexicano son esenciales en este plan, “deben aceptarlo y después formar parte del mismo, de lo contrario sería unilateral e impactaría de forma negativa en las comunidades nativas. Hay que contemplar la riqueza arqueológica, permanencia y resguardo de las costumbres, tradiciones y la forma de vida de los pueblos mayas, así como la conservación de especies animales y la viabilidad económica”.
La diputada Maricruz Roblero Gordillo (PT) destacó que la obra es trascendental para el desarrollo del sureste del país, pues no únicamente conectará a las ciudades y circuitos turísticos de la Península de Yucatán, también llevará carga, privilegiando al sector agroalimentario. “Se dará paso a microrregiones que cuenten con proximidad, diversidad y conectividad; será una obra social y de ordenamiento que combatirá la pobreza y la marginación de la zona”.
Del Partido Verde, el diputado Jesús Carlos Vidal Peniche comentó que el parlamento abierto ha sido fundamental para analizar la construcción del Tren Maya. “Este proyecto reconoce la gran deuda que el país tiene con el sureste en términos de desarrollo; este bosquejo trae consigo el bienestar de la sociedad de este territorio ya que producirá empleos e impulsará la industria”.
El diputado de Morena, Javier Ariel Hidalgo Ponce, mencionó que el Tren Maya es cien veces menos dañino en contaminación que una carretera; en el tema ambiental; es amigable. Añadió que es fundamental considerar el desarrollo urbano de cada entidad donde pasará y mantener la visión de movilidad activa, la cual podría implicar el uso de la bicicleta.
Rogelio Jiménez Pons, director general del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), explicó que en los últimos 20 años las entidades del sureste han estado en abandono, principalmente Campeche y Tabasco. Sumaron un fuerte rezago debido a que durante 10 años sólo tuvieron el 5 por ciento de crecimiento negativo. “Cancún y Mérida son los principales centros de atracción e inversión importantes, pero el resto, podemos decir, es una zona abandonada”, señaló.
El Fonatur no está en el proyecto para comprar ni expropiar tierras, sino por asociarse con comunidades y llevar a cabo un proceso de ordenamiento territorial que permita la integración de los grupos locales como una fuerza fundamental.
Lo que pretende el gobierno federal con los diversos proyectos estratégicos para el país, como el Corredor Transístmico, la refinería de Dos Bocas, Sembrando Vida y el Tren Maya, es crear condiciones de
desarrollo que ayuden a tener un balance en el progreso de México. El Tren Maya es más un programa de desarrollo que de mercado, por eso buscamos que sea la ciencia y la academia quienes orienten sobre las deficiencias que se puedan tener.
Jiménez Pons afirmó que existe gran interés por la inversión bancaria debido a que el proyecto tiene gran viabilidad a largo plazo. Recuperar el sistema ferroviario con trenes modernos es fundamental para la economía del país.
También mencionó que no se dañará la fauna endémica con el uso de sistemas de prevención contra el atropellamiento de animales, como en Canadá. “Es muy importante por parte del Poder Legislativo que nos esté checando, queremos hacer bien las cosas y estamos obligados a hacerlas bien”, indicó.
En su intervención, la directora general de El Colegio de la Frontera Sur, María del Carmen Pozo de la Tijera, señaló que el sur sureste de México es una zona de alto rezago social; pero a su vez es una región de alta biodiversidad, riqueza en recursos naturales, grandes macizos forestales y ecosistemas únicos.
También es la región de la cultura maya donde habitan comunidades con prácticas tradicionales aún vivas; sin embargo, el tejido social se ha venido afectando debido a desarrollos en pueblos turísticos mal planeados.
“Los foros realizados en cada uno de los cinco estados en los cuales se proyecta la realización del Tren Maya hace ver que es necesario inyectar recursos económicos que permitan un desarrollo sustentable, cuidando a las comunidades favorecidas a fin de que no sean afectadas”, dijo.
Agregó que la participación en los foros permitió escuchar a distintos sectores y conocer puntos de vista a favor o en contra de esta obra. “Con la colaboración de diversas instituciones de la región continuaremos con el compromiso de reunir a los académicos en mesas de trabajo para verter y conjuntar información que permita opiniones más puntuales, pretendiendo obtener propuestas de formas de acción en torno a las temáticas del medio ambiente e impacto sociocultural”.