José Vilchis Guerrero
Se perdió el rastro de las donaciones internacionales para la reconstrucción
Hace un año, cuando se cumplió un año de los sismos del 7 y 19 de septiembre de 2017, que afectaron más de 200 mil 500 casas, escuelas, templos católicos y hospitales del Sector Salud, en la Ciudad de México, Puebla, Morelos y Oaxaca, el entonces presidente Enrique Peña Nieto y el jefe de gobierno Miguel Ángel Mancera les hicieron a los damnificados ofrecimientos de “créditos blandos”, que rechazaron con rechiflas y mentadas, porque para la reconstrucción había recursos suficientes de donaciones internacionales y nacionales de más de 500 mil millones de dólares.
Países como Rusia, China y El Vaticano, donaron a México 20 millones de euros, un millón de dólares y 150 mil dólares, respectivamente; y una veintena más de otros países de América, Asia y la Unión Europea participaron con sumas diversas que sólo el gobierno mexicano conoció. Asimismo, otras donaciones de un millón y de más un millón de dólares, las hicieron instituciones bancarias como BBVA Bancomer, Scotiabank y Banco Interamericano de Desarrollo.
Argentina, Chile, Estados Unidos, Alemania, Guatemala, Canadá, Venezuela, El Salvador, Perú, Costa Rica, Israel, Ecuador, Japón, Suiza, Honduras, Panamá, Unión Europea, Emiratos Árabes y España, se sumaron a la solidaridad internacional con miles de millones de dólares para la reconstrucción de viviendas en la zona centro y sur de México.
De un millón de dólares y más, se sumaron las donaciones de empresas como Coca Cola, Walmart, Samsung, Google, Facebook, Apple, AT&T, Home Depot, Abbot, Total Play, Altan Redes, Grupo Pachuca, Grupo Maná, Iniciativa Yo x México y los futbolistas Miguel Layún y Javier Hernández, quienes aportaron éstos últimos 195 mil dólares.
Así como las donaciones de la comunidad mexicana en Londres y en Bruselas con 12 mil y 5 mil 800 dólares respectivamente y con cantidades similares los personajes Sergio Pérez, Salma Hayek, Ricky Martin, Shawn Méndez, que en total sumaron 36 millones 963 mil 377 dólares.
Los recursos provenientes de la solidaridad internacional y las donaciones de personajes, empresas, artistas, deportistas y gobiernos extranjeros sumarían –de acuerdo a cifras oficiales que se hicieron públicas hace un año- un total de 665 millones 340 mil 786 pesos, que serían los destinados a la reconstrucción de las viviendas destruidas en los sismos del 7 y 19 de septiembre de 2017.
Desde Los Pinos se informó que entre donaciones de nacionales y extranjeros se superó la cifra de 500 mil millones de pesos, estimación de la Presidencia de la República, para la reconstrucción de las viviendas en las entidades afectadas, Morelos, Puebla y Oaxaca, incluida la Ciudad de México.
Para llegar a la mencionada suma, a estas donaciones se sumaron las cantidades diversas que hicieron mexicanos y extranjeros a través de depósitos bancarios, y las que donaron los partidos políticos y la Suprema Corte de Justicia de la Nación durante el proceso electoral de 2018 y fundaciones mexicanas mediante depósitos cuya cantidad no fue revelada.
Sin embargo, para entonces, a un año de los sismos del 7 y 19 de septiembre de 2017, la información sobre los recursos destinados a la reconstrucción y atención a los damnificados mediante recursos públicos o de las donaciones privadas, era irregular e incompleta, de acuerdo con un informe realizado por seis organizaciones no gubernamentales para la plataforma #Epicentro.
Organizaciones como Transparencia Mexicana y Fundar, que dieron seguimiento a la aplicación de los recursos disponibles para la reconstrucción y apoyo a los damnificados de la Ciudad de México, Puebla, Oaxaca y Morelos, se manejaron con cifras incompletas y hay incluso contradicciones entre las mismas, de tal modo que se ha dificultado confirmar o cruzar datos.
Por un lado, la Secretaría de Educación Pública promovió una actualización a finales de diciembre, a propósito de los daños y reconstrucción de escuelas públicas, algunas de las cuales estaban entonces en proceso de reconstrucción y en otras no se habían concluido ni siquiera los estudios previos.
Trascendió que desapareció la información de un estudio con la actualización de la base de datos a cargo del Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros (Bansefi), sobre las cantidades transferidas, las fechas de depósito y el monto del retiro realizado por las y los beneficiarios.
También informaron ambas organizaciones civiles que esto permitió a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores y a la organización periodística Mexicanos Contra la Corrupción detectar la clonación de tarjetas y cobros indebidos de recursos públicos.
En todo el país, el total de personas que fallecieron fue de 369, de acuerdo con cifras del Gobierno federal. La Ciudad de México acumuló la mayor cantidad de fallecidos, 228 y el derrumbe de Álvaro Obregón 286 el que más vidas quitó con 49.
A pesar de la gravedad de los daños, de acuerdo con Román Meyer Falcón, titular de la Secretaría de Desarrollo Territorial y Urbano (Sedatu), se entregaron apoyos incompletos.
A dos años del sismo del 19 de septiembre (19S) de 2017, aún existe un gran número de damnificados pidiendo ayuda. Según el último censo del Programa Nacional de Reconstrucción de diciembre de 2018, aún había en ruinas 186 mil 526 viviendas, 19 mil 198 escuelas, 297 hospitales y centros de salud y 2 mil 340 inmuebles culturales dañados.
De acuerdo con datos que el Gobierno federal dio a conocer en el marco del primer aniversario del desastre natural, cuando la reconstrucción del país tenía apenas un avance del 26 por ciento, se informó que se esperaba que a finales de 2019 se alcance el 41 por ciento. Se afirma que a la fecha va un 59% de avance.
La Secretaría de Educación Pública (SEP), en coordinación con la Secretaría de Desarrollo Territorial y Urbano (SEDATU), continúan los trabajos de reconstrucción en 19 mil 198 escuelas afectadas por los sismos de 2017, en once estados del país, como parte del Programa Nacional de Reconstrucción 2019 Reconstruyendo Esperanza.
Con base en el Diagnóstico de Inmuebles Dañados 2017-2018, se atienden 4 mil 913 escuelas en el Estado de México; tres mil 70 en Chiapas; tres mil 11 en Oaxaca; dos mil 273 en Puebla; mil 990 en Ciudad de México; mil 343 en Morelos; mil 13 en Tlaxcala; 570 en Michoacán; 550 en Guerrero; 413 en Hidalgo, y 52 planteles en Veracruz.
El titular de la SEP, Esteban Moctezuma Barragán, afirmó que la reconstrucción de escuelas es una prioridad para la actual administración, y que se trabaja con total transparencia en el ejercicio presupuestal, así como en coordinación con los tres órdenes de gobierno en las entidades afectadas.
Según Moctezuma Barragán, los trabajos de reconstrucción en las 19 mil 198 escuelas se realizan con estricto apego a las normas en materia de seguridad estructural y ubicación segura; se evitan zonas de riesgo y se desarrollan con puntual adecuación a las características de cada región y localidad.
De acuerdo a la versión oficial, se elaboran análisis de vulnerabilidad de asentamientos humanos ubicados en zonas de riesgo, así como evaluaciones objetivas de daños con el acompañamiento de la comunidad escolar y el apoyo de especialistas en construcción. Habría que fiscalizarlos.
A dos años de la tragedia, el Programa Nacional de Reconstrucción 2019 Reconstruyendo Esperanza se implementa con un enfoque de derechos humanos para reconocer, proteger y restablecer el acceso a la prestación de servicios educativos, en todos los niveles, en las comunidades afectadas. Eso dicen.
Al día de hoy, Reconstruyendo Esperanza reporta un total de 7 mil 344 acciones para la reconstrucción, equipamiento y evaluación de los planteles educativos, y una inversión total de 10 mil 538 millones de pesos, de los cuales, 726 millones corresponden al Presupuesto de Egresos de la Federación 2019; 5 mil 14 millones al Fondo de Desastres Naturales; 759 millones al cobro de seguros y cuatro mil 39 millones a distintas fuentes de financiamiento.
