Quince civiles armados, cuatro policías estatales y tres personas no identificadas aún muertas, es el saldo de un nuevo enfrentamiento, ahora en Coahuila, entre bandas del crimen organizado con fuerzas federales y estatales de seguridad.
Los hechos se registraron en Villa Unión, donde además hay seis heridos y varios desaparecidos, entre ellos un adulto mayor, un niño y trabajadores de la alcaldía, según informó el propio gobernador de la entidad Miguel Riquelme Solís.
Siete de los civiles armados fueron ultimados la madrugada de este domingo también en la zona de Villa Unión, concretamente en el lugar conocido como “La brecha del gas”, que conduce a los límites con el municipio de Anáhuac, NL, por lo que suman 21 muertos, tras los 14 del día de ayer
En primera instancia, el mandatario atribuyó el ataque de este sábado al Cártel del Noreste, quienes entraron a la localidad de forma sorpresiva en un convoy de vehículos y tuvieron sitiados a los elementos de la policía municipal durante una hora.
Con el apoyo de las fuerzas federales, la policía estatal logró decomisar 14 vehículos, dos de ellos artillados, 14 armas largas así como numerosos cartuchos de diversos calibres.
El mandatario dijo que se trata de provocaciones del crimen organizado. “De manera sorpresiva se presentaron y por lo que se ve, querían causar ruido en la entidad, además caos y miedo, pero aquí están las fuerzas del orden. El crimen organizado, en específico el Cártel del Noreste, todos los días trata de entrar a Coahuila en alguna de sus puntos cardinales. Hoy entraron con al fuerza y con un contingente que hacer mucho que no veíamos”.