Representantes de laboratorios mexicanos demandaron la intervención de la Cámara de Diputados para evitar que el llamado “Cártel de la Sangre” refrende el monopolio de servicios de laboratorio y banco de sangre que en breve licitará la nueva administración del Instituto Mexicano del Seguro Social.
Al respecto, los representantes que pidieron reservar su identidad por temor a represalias, toda vez que con su denuncia afectan fuertes intereses económicos y políticos, recordaron que el IMSS ya denunció ante la Cofece a integrantes de ese “cártel” por prácticas monopólicas y se abrió la indagatoria número DE-011-2016.
Por ello, consideran necesaria la intervención de la Cámara de Diputados para poner un alto a esta práctica monopólica mediante reformas legales.
El “Cartel de la Sangre” es un grupo de empresas que se prepara, en la nueva administración federal, para monopolizar los servicios de laboratorio y banco de sangre del Instituto Mexicano del Seguro Social.
Así, ante la inminente licitación de dichos servicios acapara las 32 entidades federativas y ahora pretende acaparar las 61 partidas que el IMSS contratará en todo México mediante el control y presiones encabezados por Centrum Promotora Internacional y su filial Valtrum, de Valentín Campos; Instrumentos y Equipos Falcón, de Nóe Ramírez así como Dicipa, Hemoser, Inpromed y su filial Internet y los ya sancionados Selecciones Médicas y Selecciones Médicas del Centros, éstas últimas filiales del Grupo Fármacos que, incluso, ha sido denunciado por venta nociva de medicamento.
El “Cartel de la Sangre” busca impedir que la licitación se abra a todos los participantes que reúnan los requisitos que exigen las autoridades del IMSS, incluso la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) ha emitido 34 notificaciones a fin de investigar presuntas actividades monopólicas en los servicios de estudios de laboratorio y de banco de sangre.
Y es que el IMSS denunció a esas firmas ante la Cofece por prácticas monopólicas; el organismo abrió la referida indagatoria DE-011-2016 “por la posible comisión de prácticas monopólicas absolutas en el mercado de servicios integrales de estudios de laboratorio y de banco de sangre, así como de bienes y servicios relacionados con éstos contratados por el sistema nacional de salud”.
Aún más, la Cofece presentó querella ante la Fiscalía General de la República por el delito de colusión entre diversos agentes económicos en el sector salud. De acuerdo con el organismo, esta acción penal es adicional e independiente a la investigación ligada a laboratorios y bancos de sangre.
Sin embargo, refirieron los representantes, hasta el momento no se ha procedido contra esos consorcios que fueron beneficiados en al menos las tres pasadas administraciones federales y ahora se aprestan a refrendar el monopolio en el sector.
Por tanto, consideraron que la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados debe estar enterada de este tema, tanto por sus alcances en materia de servicios subrogados como por el daño que ocasionan al sistema de salud que, en pasadas administraciones, ha otorgado las licitaciones a ese grupo sin cuestionar costos y calidad.
Y es que, explicaron, ese grupo bloquea y se apodera del software necesario para que pequeños laboratorios mexicanos puedan participar en las licitaciones y estar en condiciones de ofrecer servicios que garantizan calidad para los derechohabientes.
