Estados Unidos deportó de enero a marzo de este año a 23 por ciento menos mexicanos con respecto al mismo periodo del 2016, informó la coordinadora de la estrategia “Somos Mexicanos”, del Instituto Nacional de Migración (INM), Dalia Gabriela García Acoltzi.
“De 1 de enero al 31 de marzo de 2017, se han registrado 38 mil 467 deportaciones, 11 mil 602 menos con respecto al mismos periodo del 2016, donde se contabilizaron 50 mil 69 deportaciones”, indicó durante una reunión con integrantes de la Comisión de Relaciones Exteriores, presidida por el diputado Víctor Manuel Giorgana Jiménez (PRI).
Explicó que las deportaciones han disminuido debido a que los connacionales que viven en Estados Unidos han sido más cautelosos, a fin de evitar cometer alguna falta administrativa o incurrir en alguna irregularidad en aquel país.
La funcionaria del INM dijo que los principales estados de detención de mexicanos en la Unión Americana son Texas, California, Arizona y Nuevo México.
Sostuvo que el 93 por ciento de mexicanos que son deportados de Estados Unidos, sólo ha cometido el “delito der ser indocumentado”, conforme la legislación de ese país.
“En el marco jurídico de Estados Unidos es un delito ser indocumentado, incluso, el 93 por ciento de los connacionales deportados su único delito en el país vecino del norte es ser ilegal”, señaló.
Añadió que el retorno voluntario de connacionales también ha cambiado, ya que anteriormente el que regresaba por decisión propia ya poseía aquí casa y negocio o era jubilado, por lo que ya tenía un sustento; ahora regresan por temor a las nuevas políticas migratorias de Estados Unidos y sin las condiciones de prevención para vivir definitivamente en el país.
Puntualizó que, hasta el momento, “sólo 89 familias de Chicago y 80 de Los Ángeles han expresado su intención de retornar al país al terminar el ciclo escolar”.
García Acoltzi comentó que el INM, además de otorgar una constancia de repatriación a los connacionales para que puedan accesar a distintos servicios y programas e, incluso, hacer movimientos bancarios, está gestionando con el Instituto Nacional Electoral (INE) la posibilidad de darles una credencial que será sólo como documento de identidad.
“La credencial no tendrá efectos en temas electorales, solamente será un documento de identidad y tendrá una vigencia temporal mientras cambian esta identificación por un documento ya en su lugar de residencia”, enfatizó.
Informó que en 2016 México recibió 219 mil 932 deportados, de los cuales 22 mil 95 (10.4 por ciento) son mujeres y 197 mil 27 son hombres (89.6 por ciento), y de este universo, 206 mil 186 (93.7 por ciento) son adultos, mientras que 13 mil 746 ( 6.3 por ciento) menores.
Detalló que “en Texas fueron detenidos en ese año 74 mil 777 (34 por ciento) mexicanos, en California 64 mil 660 (29.4 por ciento), mientras que en Arizona se registraron 54 mil 983 (25 por ciento) detenidos y en Nuevo México siete mil 478 (3.4 por ciento)”.
Asimismo, de este universo, en 2016, el 64 mil 814 (29.47 por ciento) cuenta con secundaria terminada, 23 mil 775 (10.85 por ciento) concluyó el nivel bachillerato y mil 979 tienen un nivel de licenciatura.
García Acoltzi explicó que existen dos programas para atender a repatriados: Bienvenido Paisano, dirigido a connacionales que residen de manera legal en el extranjero y que vienen de visita al país, y la estrategia Somos Mexicanos, que atiende las necesidades de los deportados o personas que regresan voluntariamente.
Giorgana Jiménez reconoció los esfuerzos del INM en implementar una estrategia para atender a los connacionales que regresan de Estados Unidos, pese a los limitados recursos con los que cuenta.
Comentó que él, junto con un grupo de diputados, ha realizado visitas a distintos consulados del país en la Unión Americana, donde han constatado que ya se han acondicionado módulos específicos de los programas de apoyo a migrantes.
La diputada Arlette Muñoz Cervantes (PAN) resaltó la importancia de regularizar el reingreso de los connacionales, por lo que recordó que presentó una iniciativa sobre migrantes en retorno, que busca una coordinación interinstitucional para brindar una atención integral a los mexicanos que son deportados o vuelven por decisión propia.
La vicecoordinadora de MC, Claudia Corichi García, dijo que se requiere una política transversal en materia de migración y, en ese sentido, es necesario repensar o adaptar la aplicación de presupuesto y las políticas públicas, para que vayan acorde con la realidad.
