Se estima que alrededor del 2 por ciento de la población mundial tiene epilepsia “pero es una cifra muy conservadora, porque gran parte de los casos no los tenemos diagnosticados”, aseguró la Dra. Ana Luisa Velasco Monroy, Jefa del Servicio de Neurología del Hospital General de México “Eduardo Liceaga”, de la Secretaría de Salud.
La epilepsia es una enfermedad neurológica que se caracteriza porque las neuronas (células que forman nuestro cerebro), comienzan a descargar en forma anormal y desencadenan crisis epilépticas. El cerebro está formado por miles de neuronas que se encargan de todas nuestras funciones; son como un sistema eléctrico. Continuamente mandan descargas eléctricas, pero cuando estas descargas ocurren y no deben de pasar, aparecen los síntomas de la epilepsia.
“La gente comúnmente piensa en las crisis tónico clónicas, llamadas crisis generalizadas o convulsivas, que son muy aparatosas”. Pero este tipo de crisis son las menos frecuentes e implica que todas las neuronas descargan a la vez.
El 70 por ciento de las epilepsias son de otros tipos. Hay, inclusive, algunas que no se ven y que solamente las siente el paciente. “Dependiendo de dónde se produzcan las descargas son el tipo de crisis; si las descargas surgen en el área motora de la mano., vamos a ver crisis focales; si ocurren en las zonas de emociones, vamos a sentir miedo, ansiedad, sensación de vacío en el estómago y estas son crisis focales del lóbulo temporal”, agregó. Hay también crisis focales que se confunden con ausencias, las cuales son muy breves, no hay ningún movimiento asociado, si acaso un ligero parpadeo y no afectan la conciencia del paciente.
La Dra. Ana Luisa Velasco Monroy señaló que la epilepsia puede presentarse en cualquier etapa de la vida, desde recién nacidos hasta en adultos mayores. Esto hay que tomarlo en cuenta porque muchas veces se confunde con demencias. Lo cierto es que las epilepsias tardías, como todas en general, se pueden controlar satisfactoriamente.
“La epilepsia es una enfermedad que afecta a todas las clases sociales, a todos los niveles socioeconómicos”. El reto más importante es la educación, porque sigue habiendo un tabú, los familiares y los propios pacientes niegan la situación, sobre todo cuando tiene crisis no convulsivas. Otro reto es poder tratar las comorbilidades, lo cual es fundamental.
Avances farmacológicos
Los avances farmacológicos recientes y el enfoque de tratamiento interdisciplinario, han impactado favorablemente en el pronóstico de los pacientes con epilepsia. “Hoy se hace un tratamiento específico, conocemos más al paciente, su estilo de vida, su ámbito familiar y socioeconómico, lo que ayuda de forma muy importante para adecuar el tratamiento y lograr el control de la epilepsia”, externó.
Por ejemplo, explicó la Dra. Ana Luisa Velasco Monroy, “hoy contamos con fármacos de última generación, como Fycompa® (perampanel), disponible en México, el cual ocupa un lugar importante en las herramientas actuales” para tratar los síntomas de las crisis epilépticas focales, de origen parcial o secundariamente generalizadas, en pacientes desde los 12 años de edad en adelante.
“Es un medicamento de amplio espectro muy efectivo, que se utiliza en dosis muy bajas, una sola toma al día y muy flexible en los horarios”. Facilita el apego al tratamiento y el paciente puede controlar satisfactoriamente su enfermedad y llevar una vida activa y productiva”, añadió.