La organización criminal encabezada por Julio César Ramos Sáchez alías ‘Julio Rico’, apunta a nexos directos con funcionarios de gobierno de la administración de Néstor Núñez en la alcaldía Cuautémoc.
De acuerdo a información obtenida través de denuncias ciudadanas, así como de labores de gabinete y campo de personal de la Policía de Investigación, dicho grupo delictivo reunía alrededor de siete mil comerciantes ambulantes a finales de los años ochenta, a quienes bajo amenazas cobraba derecho de piso desde entonces.
Recientemente, Julio César Ramos Sánchez alias “Julio Rico”, junto con su hijo Abraham Ramos García, se dedicaban a controlar al comercio formal e informal mediante la extorsión y amenazas, lo que permitía la obtención de recursos económicos, tolerados por servidores públicos de la Cuauhtémoc, directamente por el Director General de Gobierno, Salvador Santiago Salazar ‘Chava’.
Denuncias ciudadanas revelan que la gente de ‘Chava’ protegía a los ‘Rico’, con la intención de mantener el control de los comerciantes a través de extorsiones, por lo cual recibía su parte.
Julio César Ramos Sánchez (a) “Julio Rico”, heredó el control de los comerciantes ambulantes en la alcaldía Cuauhtémoc, en el Centro Histórico de la CDMX, de su madre Silvia Sánchez Rico, quien a su vez lo heredó de Guillermina Rico, cuyo liderazgo entre comerciantes se remonta a los años 80 cuando controlaba la Unión de Comerciantes de la Antigua Merced, con cerca del 80% de los comerciantes ambulantes ubicados en 44 calles del Centro Histórico.
Las dimensiones alcanzadas por esta organización fueron el resultado de un largo proceso, que incluyó la entrega de un permiso exclusivo en 1982 para vender en las calles Correo Mayor, El Carmen, Corregidora y Academia, ubicadas en el barrio La Merced, al oriente del primer cuadro de la Ciudad de México.
Mediante el seguimiento a la investigación y el trabajo de inteligencia realizado, se pudo determinar que Juan Tomás Rangel Balderas, aprehendido también por la PDI, posiblemente brindaba protección a Julio César Ramos Sánchez (a) “Julio Rico”, además de que probablemente coordinaba el control de los cobros de derecho de piso, extorsión y secuestro a comerciantes de las calles del Centro Histórico de la Ciudad de México.
A Juan Tomás Rangel Balderas, quien fungió como Coordinador Territorial de Cuauhtémoc- 3 de la Policía de Investigación, se le vincula la organización criminal denominada “Cártel La Unión Tepito”, por su posible relación con Óscar Andrés Flores Ramírez (a) “Lunares” y con Carlos Iván Monrroy Fuentes (a) “El Santero y/o El Niño Problema.
Todos los actos eran de conocimiento del área de Gobierno de la Cuauhtémoc, donde nadie se atrevía a decir nada, pues era una de las principales ‘entradas’ de la alcaldía a través de ‘Chava’, quien toleraba a los ‘Rico’ desde que llegó al cargo, según denuncias ciudadanas.