*Cada día se hace más popular y peligroso en redes sociales
(Agencias) Tras la ‘Ballena Azul’, al que se atribuyeron varios casos de suicidio entre adolescentes, llega otro reto que se está difundiendo en redes sociales y que comienza a ser preocupante. Se le denomina el ‘reto del agua hirviendo’ (‘hot water challenge’ en inglés) y consiste en calentar agua hasta que hierva para después arrojársela a una víctima al azar y de manera desprevenida.
Kiari Pope, una niña estadounidense de 8 años de edad, murió a causa de este desafío cuando aceptó beber un vaso de agua ardiendo. Ya se conoce una segunda víctima, en este caso sin consecuencia mortal. Otra menor de Estados Unidos, Jamoneisha Merritt, de 11 años, estaba en una fiesta de pijamas en casa de una amiga en el momento en que le tiraron una agua ardiendo en la cara mientras dormía
La niña se despertó con un gran dolor en la cara y fue trasladada al Hospital del Bronx de Nueva York por un adulto que en aquel momento se encontraba en la casa. Sufría quemaduras de segundo grado en rostro, hombros y pecho y tuvo que ser intervenida de urgencia.
Según informaron las autoridades, la niña de 12 años causante del ataque fue detenida y acusada de agresión.
Según recoge The New York Post, la madre de Jamoneisha Merritt, indignada por lo ocurrido, asegura que su hija tiene fuertes dolores y que los sanitarios que la atienden no la permiten verse las heridas. «Está muy triste. Está afectada emocionalmente. No entiende por qué le hicieron esto. Pensaba que eran sus amigos», manifestó la madre. «Me han dicho que ellos (sus compañeros) no la querían, que le habían estado haciendo bullying».
Por su parte, la niña responsable de la agresión ha confesado que «quería hacerlo» porque la víctima «no me cae bien», mientras su madre se muestra comprensiva con ella asegurando que este suceso es una «travesura» entre amigas.
Las redes sociales continúan haciéndose eco de este peligroso juego con mensajes de toda tipo como «¿Puedo nominarte al reto del agua hirviendo?» o «nomino a mi ex al reto del agua hirviendo» aunque siempre hay personas que ponen cordura y piden «tomarse en serio» las consecuencias de este desafío.