Para el consenso de analistas es un hecho que el Banco de México recortará su tasa de interés en la reunión de política monetaria de este jueves, pero además anticipan que en su comunicado reforzará la postura acomodaticia y dejará abierta la puerta a más recortes en las próximas reuniones.
En donde existe una división es en la magnitud del ajuste. La mayoría anticipa una baja de 25 puntos, pero una cifra creciente de economistas prevé que la autoridad monetaria podría acelerar el ritmo de relajamiento con un ajuste de 50 puntos base.
De acuerdo con un sondeo de Bloomberg, 17 especialistas prevén que la tasa de interés bajará a 7.5 por ciento y 9 estiman que se situará en 7.25 por ciento.
Carlos González, director de análisis económico y bursátil en Grupo Financiero Monex, señaló que esperan un recorte de 25 puntos base, en línea con los recortes que ha realizado la Reserva Federal de Estados Unidos, pero además espera que el comunicado de Banxico tenga más señales de recortes en los próximos meses.
El economista en jefe de BBVA, Carlos Serrano, destacó que tras el cambio acomodaticio en el comunicado de la reunión anterior, ahora espera una “clara” orientación acomodaticia hacia adelante en el comunicado de política monetaria del jueves.
“Banxico finalmente estará dispuesto a caracterizar los riesgos de inflación como sesgados a la baja. En general, se justifica un tono más moderado; una mejor orientación hacia adelante será bienvenida”, indicó.
Analistas de Banorte consideraron que la decisión de la Junta de Gobierno de Banxico será dividida y con un tono más ‘dovish’ del comunicado, señalando que considera adecuado continuar con el ciclo de bajas que comenzó en agosto.
“En nuestra opinión, la reciente baja de la inflación subyacente hace probable que Banxico muestre un tono más dovish”, indicaron en un reporte.
Sin embargo, señalaron que los detalles de la dinámica inflacionaria hasta ahora, en la cual el principal determinante para que la general haya alcanzado el objetivo de tres por ciento ha sido la caída del rubro no subyacente, sugieren que el banco central no cambiará su postura de prudencia al menos en el muy corto plazo.
Monex prevé que el banco central continuará con su ciclo de recortes en la tasa de referencia durante 2020, con lo que ésta cerraría el año en 6.25 por ciento, debido a menores presiones inflacionarias, una brecha del producto negativa, y una política monetaria internacional más acomodaticia.
Discrepan en magnitud
Si bien el total de analistas prevé un recorte, no hay consenso sobre su magnitud. Se han sumado los que se inclinan por una mayor baja. En la última encuesta de Citibanamex sólo 5 de 23 analistas veían un ajuste de 50 puntos, y en la encuesta previa, apenas 2 estimaron una baja de este orden.
“La probabilidad de un recorte de 50 puntos aumenta, dado el diferencial de tasas entre México y EU y una presión inflacionaria tenue. Los 25 puntos siguen siendo el escenario base, pero dados los datos económicos mixtos y que Banxico no se reunió en octubre, cuando la Fed recortó su tasa, una baja de 50 puntos base podría ser el ajuste adecuado antes de finalizar el año”, consideró Alfonso Esparza, analista senior de Oanda.
Para Banorte, aunque prevén un ajuste de 25 puntos en su escenario base, no descartan una baja de 50 puntos base.
Explicaron que la evolución de algunos factores dan soporte para que Banxico acelere el ritmo de relajamiento; entre ellos, el que la inflación se ubica en el objetivo de 3 por ciento, que la actividad económica permanece limitada, que existe amplio espacio de relajamiento relativo a otros países de la región y a que algunos riesgos para la estabilidad financiera se han moderado.
Para los economistas de Wells Fargo, con la inflación subyacente cayendo por cuarto mes consecutivo y las expectativas de crecimiento aún moderadas, “esperamos que el banco central reduzca la tasa otros 25 puntos y continúe flexibilizando la política en 2020”.