El Banco de México sí tiene cierta responsabilidad en el crecimiento de la economía nacional, reconoció el subgobernador del mismo, Jonathan Heath.
En el seminario “25 Aniversario de la Autonomía del Banco de México”, organizado por la UNAM, explicó que el instituto central no tiene un mandato único, pero sí prioritario: procurar la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda nacional.
Comentó que en la Constitución se habla que el objetivo prioritario de Banxico es procurar la estabilidad del poder adquisitivo, lo cual ayuda fortalecer el desarrollo nacional que corresponde al Estado, que se define mediante la competitividad, el fomento económico y el empleo.
“Por ello, de una forma u otra, indirectamente, hay cierta responsabilidad para contribuir al crecimiento económico, lo establece incluso la Constitución”, sostuvo.
La mejor forma en la que la política monetaria puede contribuir a un mejor crecimiento económico es creando un ambiente de estabilidad económica, dentro de la cual hay certidumbre, se pueden plantear las inversiones, se puede tener conocimiento de que se va a mantener ese poder adquisitivo, y se pueden tomar decisiones de una manera más eficiente, señaló.
No obstante, dejó en claro que Banxico no tiene un mandato dual de mantener bajo control la inflación e incentivar el crecimiento, como sucede en Estados Unidos.
Fue más allá al decir que esta política no debería aplicarse para Banxico. Es mejor, dijo, fortalecer el papel actual para coadyuvar al desarrollo del sistema financiero.
Anticipa menos inflación
Tras recordar las altas tasas inflacionarias que existieron en el país en la década de los 70 y 80 y el repunte que tuvieron los precios de los bienes y servicios en el país en 2017, por la liberación de los precios de la gasolina, anticipó que en agosto habrá buenas noticias en materia de inflación.
Estimó que la tasa bajará a 3.1 por ciento o, al menos, se ubicará por debajo de 3.2 por ciento, ya muy cerca del objetivo del Banco de México.
“La autonomía de Banxico ha producido resultados y hemos dejado atrás las etapas de inestabilidad de inflación que fueron muy características en México en los 70, los 80 y los 90 y también en otras épocas de nuestra historia económica”, comentó.
Hay espacio para bajar tasas
El Subgobernador del Banco de México consideró qué hay oportunidad para empezar a bajar las tasas de interés, ante las menores presiones inflacionarias.
“Tenemos la oportunidad para empezar a relajar la posición monetaria. No hablamos de abandonar una postura restrictiva, sino más bien hacerla un poco menos restrictiva, no nos vamos a ir al extremo todavía, las condiciones no están ahí todavía, pero sí estamos entrando a una fase que pudiera relajarse, va a depender mucho de los datos que se vayan publicando”, comentó.
Hace unos días, el Banco de México bajó su tasa de interés de 8.25 a 8 por ciento, luego de que inició un ciclo alcista desde diciembre de 2015.