“El Congreso de la Unión declara reformados y adicionados los artículos 4º y 27 de la Constitución en materia de conservación y protección de los maíces nativos”, anunció el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Sergio Gutiérrez Luna, tras realizar el cómputo de votos aprobatorios de la mayoría de las legislaturas estatales.
Con 19 votos a favor de congresos locales, el proyecto fue aprobado y enviado al Ejecutivo Federal para su promulgación. La reforma reconoce a México como el centro de origen y diversidad del maíz, elemento fundamental en la identidad nacional, la alimentación y la cultura de los pueblos indígenas y afromexicanos.
Protección al maíz nativo y prohibición de transgénicos
La modificación constitucional establece que el cultivo de maíz en México deberá mantenerse libre de modificaciones genéticas, prohibiendo aquellas técnicas que alteren sus características naturales, como los organismos transgénicos.
Además, cualquier otro uso de maíz genéticamente modificado deberá someterse a evaluaciones rigurosas para garantizar que no represente amenazas a la bioseguridad, la salud y el patrimonio biocultural del país.
Soberanía alimentaria y fortalecimiento del campo
El Estado promoverá la biodiversidad, la soberanía alimentaria y el manejo agroecológico del maíz, incentivando la investigación científica y el conocimiento tradicional. Asimismo, se impulsará el desarrollo rural con cultivos tradicionales de semillas nativas, en especial el sistema milpa, a través de asistencia técnica y fortalecimiento de instituciones nacionales.
La reforma representa un paso clave en la defensa de la riqueza agrícola y cultural de México, garantizando la conservación del maíz nativo y la seguridad alimentaria de futuras generaciones.