CHINA.- La infección por el coronavirus de China ha contagiado a más de 8,100 personas en el mundo, según cifras del jueves, superando el total de la epidemia de SARS 2002-2003, lo que anticipa que la crisis de salud que se propaga rápidamente podría asestar un duro golpe a la segunda economía mundial.
La mayoría de las infecciones y las 170 muertes han ocurrido en China, donde el virus se originó en un mercado donde se vendían ilegalmente animales silvestres en la ciudad de Wuhan, según los últimos datos oficiales. Además, hay registro de 100 casos en otros países, desde Japón hasta Estados Unidos.
El Comité de Emergencia de la Organización Mundial de la Salud se reunía el jueves para decidir si el virus constituye una emergencia internacional.
La medida desencadenaría pautas más estrictas de contención e intercambio de información, pero puede decepcionar a Pekín, que había expresado su confianza en derrotar al virus “del demonio”.
Además, podría preocupar más a los inversionistas, que ya han estremecido a los mercados por los efectos dominó que podrían tener los perjuicios a la economía de China.
“El temor es que (la OMS) pueda hacer sonar la alarma… por lo que la gente está sacando dinero de la mesa”, dijo Chris Weston, jefe de investigación de la correduría de Melbourne Pepperstone.
El Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SARS), que también vino de China, mató a unas 800 personas y costó a la economía global un estimado de 33,000 millones de dólares, o un 0.1% del PIB mundial, en 2003.
Las acciones mundiales caían el jueves, mientras que el yuan retrocedió a su nivel más bajo este año, el petróleo volvía a bajar y los activos de refugio como el oro subían.
El principal índice bursátil de Taiwán, que envía el 40% de sus exportaciones a China, cerró con una caída del 5.75% en el primer día después del feriado del Año Nuevo Lunar.
Además, ha crecido la preocupación por las dificultades que pueden tener miles de empleados de fábricas chinas para volver al trabajo la próxima semana tras las vacaciones.
Medidas de prevención
Numerosos países comenzaron a aislar a cientos de ciudadanos evacuados de la ciudad china de Wuhan en un esfuerzo por detener la propagación mundial de la epidemia.
Google, del grupo Alphabet Inc, y la sueca IKEA se unieron a otras grandes empresas que paralizaron su actividad en China, y aumentó la lista de eventos deportivos afectados por el virus.
Las aerolíneas que están suspendiendo vuelos a China continental incluyen a Lufthansa, Air Canada, American Airlines y British Airways.
La Asociación de Fútbol de China aplazó los partidos nacionales en 2020 y los partidos de clasificación para los Juegos Olímpicos de fútbol femenino en Australia están en duda, ante la cuarentena al equipo chino en un hotel de Brisbane.
Casi todas las muertes se han producido en la provincia central de Hubei, donde viven unos 60 millones de personas y que ahora está prácticamente bloqueada.
Se han notificado infecciones en al menos otros 16 países con 105 casos confirmados, pero no se han producido muertes fuera de China.
Es demasiado pronto para determinar la tasa de mortalidad, ya que es probable que haya muchos casos con dolencias más leves que no se detecten. Al igual que otras infecciones respiratorias, el coronavirus se propaga entre las personas por las gotas de la tos y los estornudos.
El virus tiene una incubación de entre uno y 14 días, y hay indicios de que puede propagarse antes de que aparezcan los síntomas.
El ministro de la Comisión Nacional de Salud de China, Ma Xiaowei, ha dicho que el virus era infeccioso durante la incubación, lo que no ocurrió con el SARS.
Planes de aislamiento
Los países que han evacuado a sus ciudadanos de China tienen que decidir qué hacer con ellos.
Australia, Corea del Sur, Singapur y Nueva Zelanda pondrán en cuarentena durante al menos dos semanas a todos los evacuados, muestren o no síntomas, mientras que Estados Unidos y el Japón están planteándose un aislamiento voluntario durante períodos más cortos.
Manifestantes surcoreanos utilizaron tractores para bloquear el acceso a las instalaciones destinadas a centros de cuarentena en las ciudades de Asan y Jincheon. Un grupo pedía el jueves que el lugar se instalara más lejos de hogares y escuelas.
“Soy madre de dos niños de 3 y 4 años”, dijo Lee Ji-hyun. “Estaba tan preocupada que los envié a casa de mis suegros”.
El presidente Moon Jae-in instó a la gente a no ceder al miedo, mientras el país se preparaba para evacuar al primero de los 700 ciudadanos de Wuhan.
“Las armas que nos protegerán del nuevo coronavirus no son el miedo y la aversión, sino la confianza y la cooperación”, dijo Moon.
En Italia, unas 6,000 personas estaban retenidas a bordo de un crucero mientras se le realizan exámenes a pasajeros chinos que se sospecha que se contagiaron con el coronavirus.