*La hipertensión arterial es crónica y no se cura.
*Puede ocasionar una embolia, infarto, derrame cerebral; insuficiencia cardiaca y renal o ceguera, principalmente.
La Encuesta Nacional de Salud 2016, señala que el 25 por ciento de la población mayor de 40 años, es hipertensa. En la Ciudad de México, de acuerdo al censo de 2015, hay aproximadamente cuatro millones de personas mayores de 40 años, por lo que podríamos estimar que existen cerca de un millón de personas con hipertensión arterial en este rango de edad, informó el Dr. Jaime Reyna Bucio, Jefe de Medicina Interna del Hospital General Dr. Enrique Cabrera de la Secretaría de Salud del Gobierno de la CDMX.
El doctor Reyna Bucio, explicó que “la hipertensión arterial se define como la elevación persistente de la presión arterial arriba de 140/90; la presión normal es de 120/80”, detalló.
Agregó que es una enfermedad crónica degenerativa y peligrosa, ya que es asintomática, es decir que no produce síntomas, por lo que casi siempre se detecta en etapas avanzadas donde puede llegar a generar daños irreversibles en el corazón, los riñones y el cerebro.
Explicó que el incremento de la presión arterial daña primordialmente las arterias del cerebro, lo que puede ocasionar una embolia, infarto o derrame cerebral; afecta el funcionamiento del corazón, lo hace grande, lo que se denomina insuficiencia cardiaca; afecta los riñones y derivar en una insuficiencia renal, aumenta la presión en las arterias de los ojos y ocasionar ceguera, principalmente.
No existe una causa específica que explique el desarrollo de la hipertensión arterial, pero sí se sabe que existe factores que la predisponen, la obesidad es uno de ellos, así como el tabaquismo, el consumo de alcohol, las situaciones de estrés, tener malos hábitos de sueño y antecedentes familiares, son factores de riesgo muy importantes, comentó el Dr. Jaime Reyna, Jefe de Medicina Interna del Hospital General Dr. Enrique Cabrera.
“La hipertensión arterial es crónica y no se cura. Mucha gente tiende a pensar que porque toma sus medicamentos y se controla la presión, ya se curó y abandona los tratamientos, eso no debe suceder, la hipertensión arterial no se cura”, se controla y se debe llevar un tratamiento vigilado y otorgado por un médico, sentenció el especialista.
El Dr. Jaime Reyna, llamó a la población a modificar hábitos en el estilo de vida, a fin de disminuir riesgos de desarrollar enfermedades crónico degenerativas como la hipertensión arterial: disminuir el consumo de sal y grasas, abandonar el hábito de fumar, moderar el consumo de alcohol; hacer ejercicio, caminar por lo menos 30 minutos al día, ayuda a mejorar la salud; así como bajar de peso si se padece obesidad.
La SEDESA CDMX cuenta con servicios de nutriología para recibir apoyo y orientación nutricional, la población puede llamar a Medicina a Distancia 5132 0909, las 24 horas, todos los días.
