Mientras diversos municipios del Valle de México se preparan para enfrentar posibles recortes en el suministro de agua potable debido a los trabajos de reparación en el Macro Circuito Cutzamala, Cuautitlán Izcalli se posiciona como ejemplo de eficiencia en la gestión hídrica, al asegurar que no habrá afectaciones para su población durante este proceso.
Los trabajos de mantenimiento anunciados por la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM), que iniciaron el martes 13 de mayo en la colonia La Sardaña, ubicada en el municipio de Tultitlán de Mariano Escobedo, implicarán la reparación de una fuga en la infraestructura hidráulica que forma parte del sistema Cutzamala, impactando de forma directa en el suministro de agua para municipios como Coacalco, Ecatepec, Tultitlán y Cuautitlán Izcalli.
Sin embargo, gracias a la planeación estratégica del organismo Operagua, Cuautitlán Izcalli ha logrado acumular reservas suficientes en sus tanques de almacenamiento y asegurar el funcionamiento óptimo de sus pozos profundos, lo cual permitirá mantener la distribución continua y adecuada del agua potable durante el periodo de reparación.
“Nuestro compromiso con la población es garantizar el acceso al agua potable sin interrupciones, incluso ante contingencias regionales como la que se presenta actualmente en el Cutzamala. Esta capacidad de respuesta es producto de una gestión responsable, con visión preventiva y estrategias técnicas bien ejecutadas”, indicó personal del Gobierno Municipal a través de un comunicado.
La política hídrica implementada por Operagua no solo responde a emergencias, sino que también ha sido diseñada para garantizar la sostenibilidad del recurso, reducir la dependencia del sistema Cutzamala y fortalecer la infraestructura local. Esto incluye mantenimiento continuo a pozos, red de distribución y estaciones de bombeo, así como la modernización en los sistemas de medición y monitoreo de consumo.
Además, el Gobierno Municipal reiteró que se mantendrá en coordinación permanente con CAEM para atender cualquier eventualidad durante el proceso de reparación, así como brindar atención oportuna a las colonias que pudieran requerir apoyo complementario.
Este esfuerzo se enmarca en una visión integral de resiliencia urbana, donde el acceso al agua potable es entendido no solo como un derecho, sino como un factor clave para la estabilidad social, económica y ambiental del municipio.