Con el programa “Sí al desarme, sí a la paz”, el gobierno de la Ciudad de México logró recolectar cuatro mil 741 armas durante 2019, las cuales fueron destruidas por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
En el evento de cierre de módulos, en la Catedral Metropolitana, la secretaria de Gobierno, Rosa Icela Rodríguez, informó que se realizaron brigadas del programa en mil 841 colonias de todas las alcaldías y fueron repartidos 2.8 millones de volantes.
En el primer año del gobierno federal, expuso, nueve de cada 10 armas recuperadas de manera voluntaria en el país fueron captadas en la Ciudad de México.
“Cuatro mil 741 armas destruidas del 21 de enero a la fecha, de las cuales tres mil 602 fueron armas cortas, 837 armas largas y 302 granadas. A estas cifras se suman 928 mil 579 cartuchos y municiones, siete mil 410 estopines y seis cartuchos de dinamita”, detalló.
En colaboración con la Iglesia católica, fueron instalados 57 módulos en 53 atrios de los templos, detalló Rodríguez Velázquez y, en ese sentido, el arzobispo primado de México, Carlos Aguiar Retes, explicó que al ubicar los centros de canje en las iglesias, se da mayor confianza a la población para entregar las armas.
La secretaria de Gobierno mencionó que también se recolectaron armas de alto calibre de uso exclusivo del Ejército como fusiles AR-15, AK-47, fusiles semiautomático calibre 556, subametralladoras calibre 22, nueve y 45 milímetros y granadas de fusil.
La jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, recordó que no se realiza investigación al momento de la entrega de armas y que a cambio se entregan recursos económicos. Este año fueron invertidos casi 15 millones de pesos en este programa.
Sheinbaum Pardo informó que, a partir del año próximo, en colaboración con la Iglesia católica y con las escuelas, se implementará el nuevo programa “Alto al fuego”, como parte de “Sí al desarme, sí a la paz”.
Pretenden ir más allá y promover una cultura de no violencia para disminuir los índices de delincuencia, y trabajarán desde las escuelas para promover la cultura de paz y que los jóvenes descarten la delincuencia como una opción de vida, puntualizó.