La Cámara de Diputados aprobó el dictamen a la minuta que reforma diversos artículos de la Constitución en materia de igualdad y paridad de género; garantiza el pleno ejercicio de los derechos políticos de las mujeres en México. Se turnó a los congresos locales, para sus efectos legales.
Con la mayoría calificada de 445 votos se avalaron reformas a los artículos 2, 4, 35, 41, 52, 53, 56, 94 y 115 de la Carta Magna, para establecer la obligatoriedad constitucional de observar el principio de paridad en la integración de los Poderes de la Unión. El mismo esquema será para los estados, así como en la integración de los ayuntamientos.
En su intervención, el diputado Porfirio Muñoz Ledo (Morena) subrayó la importancia de incluir mecanismos paritarios en la función pública porque si no, nunca va a ocurrir. “Hemos propuesto que quienes estén encargados de proveer un cargo público, manden candidatas, hasta que se alcance la igualdad”.
Reconoció a todas las legisladoras, “no sólo porque esto es considerado un gran avance, sino por el entusiasmo con el que acogen esta minuta; atribuyo esta alegría a una especie de ruptura de represión”.
La presidenta de la Comisión de Igualdad de Género, diputada Wendy Briceño Zuloaga (Morena), destacó que hoy se da un nuevo sentido a la política y al ejercicio efectivo del poder desde la toma de decisiones. “Basta de decir que no hay mujeres capaces para ocupar los cargos. Se acabaron las condiciones del patriarcado que nos exigían las ciudadanas, servidoras públicas, candidatas y representantes populares”.
Por el PAN, la diputada Verónica María Sobrado Rodríguez, resaltó que la reforma va a contribuir a la consolidación de una democracia más justa, incluyente e igualitaria. “Hoy avanzamos en el derecho a la igualdad entre mujeres y hombres al establecer la participación, por igual, en las secretarías del Poder Ejecutivo federal y sus equivalentes en las entidades federativas y municipios, organismos autónomos, en la representación indígena ante los ayuntamientos, en la Suprema Corte de Justicia de la Nación y candidaturas de los partidos políticos”.
La diputada priista, María Esther Alonzo Morales señaló que con este dictamen se podrán construir procesos de elección y designación de candidatas y candidatos cada vez más paritarios. “Ya no será la Legislatura de la Paridad, creamos el Estado mexicano de la paridad; contaremos con gabinetes de mujeres y otorgamos más y mejores oportunidades para todas. Los retos siguen, pues la violencia generalizada ha evidenciado una profunda discriminación social en contra de ellas y los feminicidios, violaciones y el acoso son fenómenos que debemos erradicar”.
La diputada Olga Patricia Sosa Ruiz (PES) resaltó que con esta reforma constitucional se destaca la importancia y trascendencia que tiene la colaboración e intervención de las mujeres en la vida política de los pueblos, ya sea para hacer juzgadoras, secretarias de Estado, regidoras, síndicas u otros cargos en los que sin duda vendrán a mejorar la integración de los gabinetes, de los ayuntamientos, de los estados y de la Federación.
Maribel Martínez Ruiz, diputada del PT, argumentó que ha llegado el tiempo de la reivindicación de las mujeres y que se ponga énfasis en cómo vivimos, en cuántas oportunidades tenemos y qué estamos haciendo para aprovecharlas. “No vamos a permitir que se continúen regateando los espacios que las mujeres de México merecen, ni que con trampas y artimañas en los tribunales se les quite el derecho a estar en un órgano de gobierno”.
La diputada de MC, Martha Tagle Martínez, resaltó que, a partir de esta reforma, “nos sentemos para ver cuál es la agenda que sigue, pues la paridad no es solamente que haya más mujeres en los espacios de toma de decisiones, queremos más mujeres en el poder, pero para cambiar la vida de todas nosotras. No basta con que lleguemos más diputadas, senadoras, gobernadoras, ministras, juezas y mujeres tomando decisiones, si no llegamos a cambiar vidas”.
Por el PRD, la diputada María Guadalupe Almaguer Pardo, externó que este día representa un hito en la historia de esta Cámara y del Congreso, porque se reconocen derechos plenos, humanos y políticos a la mitad de la población. “Hoy México deja de ser un país con ciudadanos de primera y ciudadanas de segunda. La paridad significa igualdad, no concesión, autorización ni permiso; deberá notarse en los programas gubernamentales, en el presupuesto, en las políticas públicas y en las leyes que protegen nuestros derechos al trabajo, a la salud y a la vida sin violencia”.