Con una inversión de 7 mil 500 millones, recurso público, se construyó el Camino Libre a Tonanitla, una vialidad que no cobrará peaje, acción que desde hace varias décadas en el Estado de México no se veía, pues el camino, de 14 kilómetros, fue construida por el Gobierno Federal, que comunicará hacia la zona del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), es muestra de un gobierno humanista, coincidieron integrantes del Grupo Parlamentario de Morena en el Congreso Mexiquense.
Al respecto, la diputada de Ecatepec, Azucena Cisneros destacó que en tan solo 10 minutos se podrá recorrer desde el Puente de Fierro a la terminal aérea, además mejora la conectividad en municipios como Ecatepec, Tecámac, Zumpango, Nextlalpan y Tonanitla.
Señaló que esta vialidad representa lo que hace el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, con una visión completamente humanista, a diferencia del gobierno estatal que construyó la Autopista Urbana Siervo de la Nación que es de peaje y el Macrolibramiento Mexiquense, ambas concesionadas.
Aseveró que desde hace décadas los gobiernos estatales del tricolor privilegiaron la construcción y concesión de autopistas de peaje, ejemplo claro es el Circuito Exterior Mexiquense, una vía incompleta, con las cuotas más caras del país, así como la autopista Toluca-La Marquesa, Naucalpan-Toluca, y diversas vialidades más, pero todas con tarifas elevadas.
De igual forma, el diputado local del Distrito XII, Marco Antonio Cruz, reconoció que esta obra vial mejorará la movilidad en toda la región, en especial por ser gratuita se potenciará el desarrollo en la zona.
Aunque lamentó que el Gobierno del Estado haya abandonado la inversión en caminos estatales aledaños a la terminal aérea, pese a que desde 2022 se solicitó que destinaran recursos para mantenimiento de caminos estatales, pero ello no ocurrió.
Tal es el caso de la vialidad Recursos Hidráulicos, detalló, que no es de cuota, por lo que tiene serios problemas de deterioro, abarca unos 30 kilómetros desde Tultitlán hasta Nextlalpan, pero presenta un severo deterioro a lo largo de unos 10 kilómetros en la parte final hacia la terminal aérea y es justamente la que va paralela a lo que será la ampliación del Tren Suburbano.