El Carrillo Gil abre espacios a nuevos talentos

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Cambio climático, arquitectura, tecnología, el cuerpo, son algunos de los temas que aborda la exposición Parasitage. Ruidos Negros que presenta el trabajo de 10 artistas seleccionados del programa BBVA-MACG, la cual se encuentra disponible al público desde este 1 de febrero.

Es una generación de artistas que va caminando de la mano, diferenciados en su camino artístico pero aprendiendo unos de otros, dijo la directora general del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, Lucina Jiménez, al precisar que “estamos ante una de las plataformas más importantes que existen hoy en día para apoyar el trabajo de los jóvenes artistas de México”.

Al destacar la colaboración de la Secretaría de Cultura, a través del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, y de la Fundación BBVA, refirió que “es una posibilidad de dar la palabra, las paredes, los espacios a la creación contemporánea, a generaciones que tienen mucho que decirnos”.

Reconoció que el MACG, al mismo tiempo que alberga una de las colecciones más importantes de arte, lleva esta relación con una Fundación comprometida con el arte mexicano para dar paso a nuevas generaciones, y ese es precisamente el compromiso del INBAL.

Acompañada por la directora del Museo de Arte Carrillo Gil, Tatiana Cuevas; por Sofía Ize Ludlow, directora de la Fundación BBVA; por Gabriela Velásquez, directora de Fomento Cultural, así como por el curador Michel Blancsubé, la titular del INBAL celebró el espíritu participativo con el cual la Fundación se comprometió desde hace 12 años a generar no sólo apoyo, sino crear una plataforma colaborativa de exploración, de consolidación, de posibilidades, de autodefinición en la producción de arte.

El  trabajo conjunto que realiza el MACG y el Programa de Becas del BBVA es un espacio para que los artistas jóvenes crezcan como una generación; que se distingan cada uno en su identidad artística, pero además en colaboración con otros, reconoció la Directora General del INBAL durante la apertura de Parasitage. Ruidos Negros la cual congregó a ciento de visitantes en su primer día de exposición.

Apertura de campos de reflexión y crítica: Tatiana Cuevas

La directora del recinto, Tatiana Cuevas, indicó que el Programa BBVA continúa posicionándose como laboratorio formativo que impulsa no sólo la profesionalización de las jóvenes generaciones de artistas, sino la apertura de campos de reflexión y critica.

En tanto, Sofía Ize indicó que este programa refleja parte de lo que hacen en la Fundación; son muchos años de colaborar, y este es el resultado que se puede lograr cuando hay entendimiento; y manifestó: “Estamos abiertos a trabajar en conjunto por el talento en México”.

A lo largo de las seis ediciones han participado 80 asesores, además de ocho curadores invitados. En el programa confluyen profesionales de diferentes disciplinas que apoyan a los becarios en su investigación y trabajo artístico.

Finalmente, Gabriela Velásquez, de la Fundación BBVA, destacó que uno de los propósitos del programa es profesionalizar el quehacer de los jóvenes del país, impulsar todas las disciplinas artísticas y enriquecer el patrimonio cultural de México.

Los artistas están conectados con el presente, afirma el curador

De acuerdo con el curador Michel Blancsubé, lo que une el trabajo de estos artistas nóveles es el hoy: Ya no viven en su burbuja imaginando, sino que están conectados con el presente, especialmente cuando uno tiene menos de 35 años.

Parasitage. Ruidos Negros está abierta al público en el MACG hasta el 3 de mayo. En la muestra se pueden apreciar cuadros, videos, performance, fotografías, montajes, esculturas, collages. Al respecto, Michel Blancsubé asegura que “en cuestión de técnicas, hay algunos que miran más por el pasado, intentando rescatar cosas de su cultura. Otros, miran al futuro, contando los bríos del porvenir, con un peso más universal y piezas más interactivas, que son cosas que el público del arte contemporáneo busca.

“Los dos elementos del título son bastante negativos: un parásito es un bicho que intentamos evacuar; Ruidos Negros me hace pensar en aguas negras, algo que no nos gustaría cruzar. El mundo enfrenta retos, en los cuales tendremos que invertir, que vivirlos y sacar algo positivo de algo negativo. Los artistas hacen una reflexión sobre esto”, dijo el curador, quien convivió con ellos durante año y medio. 

Estos 10 artistas no son un número que cayó únicamente al momento del programa, sino que es el fruto de una práctica que han tenido y desarrollado desde años pasados. Lo que quería hacer es darle visibilidad al trabajo de cada uno, por ello se proyectarán 50 videos de sus trabajos anteriores”.

De acuerdo con Blancsubé, su trabajo con los artistas fue de inmersión: “Los acompañé a sus espacios, como el Pico de Orizaba, incluso con proyectos relacionados con la preservación de algunas lenguas, entre ellas el mixe. “Me involucré totalmente en los trabajos de los participantes por decisión propia y para no sólo imaginar desde la silla frente a mi computadora el trabajo que desarrollan estos jóvenes, sino que me interesaba acercarme desde el territorio en que ellos investigan y laboran”.

Cabe señalar que este año, en la sexta edición el Programa BBVA-MACG se registraron 443 propuestas de 29 estados de la República, de los cuales 300 concluyeron de forma adecuada y sólo se eligieron 10 artistas.

Nuevas formas de interpretar el arte

Entre los proyectos, está Jamyajtsëm, obra de Octavio Aguilar, quien realiza una reflexión sobre la preservación del lenguaje y la cosmogonía de la cultura Ayuuk. Rolando Jacobo presenta Condominios 72 (2020), una instalación que entrelaza la arquitectura funcionalista con ideales sociales. Tania Ximena comparte un video que cuenta de forma antropomorfizada la historia del río Jamapa. La pieza se acompaña una escultura de resina y un temple sobre lino.

Anni Garza Lau presenta Simbiosis programada: el cuerpo post-internet, con la que cuestiona el papel de la tecnología en la vida cotidiana al mismo tiempo que vislumbra el posible futuro que pueda derivar de esa situación. Elsa-Louise Manceaux trabajó la instalación La manada del rebaño, conformada por una serie de pinturas al fresco. La obra de Erik Tlaseca, Algún día llegará la noche, alude a la figura de Xipe Tótec.

Néstor Jiménez enfoca su trabajo La sombra de las banderas (2019) en la actividad y estética de los movimientos populares de izquierda de los años noventa; Ulises Matamoros vincula en Chasen Thajni: La casa de todos una estructura arquitectónica con un dispositivo sonoro que transmite en tiempo real lo que sucede en el interior.

Víctor Del (M)Oral Rivera, en Caída libre de la letra A (Lecto _escultura No. A), transita entre el performance y la escultura para reflexionar sobre la identidad entre lenguaje y paisaje, y Yanieb Fabre en Cómo devenir en animal en diez pasos explora el erotismo, el deseo, el paisaje y la memoria en diferentes formatos.