El Partido de la Revolución Democrática se solidariza con el pueblo venezolano y hace un llamado a las partes políticas involucradas a buscar una salida a este conflicto, respetando de manera irrestricta los derechos humanos y evitando una guerra interna que complicaría aún más la vida en esta nación sudamericana.
Reiteramos que solo a los venezolanos les compete encontrar una solución a este problema; deben respetarse los derechos y libertades de las personas, así como llevarse a cabo elecciones libres, para tener un nuevo régimen democrático.
En este proceso que se vive en Venezuela, quien está pagando esta crisis política es la ciudadanía, quien sufre una inflación severa que los coloca en una situación indefensa al no poder acceder a medicinas, alimentos y servicios básicos, por ello, las partes involucradas deben preponderar esta situación y llegar a un entendimiento que dé paso a una transición de gobierno pacífica.
Las voces que señalan al gobierno de Maduro, ha generado presos políticos y una represión en contra de quienes no coinciden con el régimen.
Por ello, el PRD considera que debe darse ese cambio en el rumbo político respetando la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, donde se lleve a cabo una elección democrática, dónde participen todos los sectores de la sociedad venezolana, por el bien de esta nación hermana que ahora se encuentra en una situación compleja y su pueblo sumido en una severa crisis económica y social.
El actual gobierno venezolano, debe permitir la ayuda humanitaria de la comunidad internacional, donde miles de personas carecen de lo más elemental para subsistir y aceptar la propuesta del presidente encargado, Juan Guaidó, de llevarse a cabo elecciones para elegir un nuevo mandatario, las cuales estén observadas por la comunidad internacional.
Hacemos votos para que Maduro pondere la necesidad del proceso de transición, donde sólo el pueblo venezolano sea quien decida el rumbo que deberá seguir su nación, donde se garantice el respeto a la democracia, derechos humanos y libertad de pensamiento.
