México, a pesar de contar con los recursos necesarios para ofrecer una atención de calidad, tiene una gran inequidad social en los sistemas de salud, señaló el representante de Organización Panamericana de la Salud (OPS), Cristian Morales Fuhrimann.
“(El país) siendo la décima tercera potencia mundial, económicamente hablando, cuenta con estos recursos que están muy mal repartidos, (pues) en algunos lugares sobran y en otros hacen falta de forma dramática”, refirió.
En el marco del Foro Nacional e Internacional por la Calidad en Salud, señaló que la mayor parte de los sistemas de salud de la región tienden a reproducir las desigualdades sociales.
“No es aceptable que haya municipios con cobertura por sobre el 90 por ciento, y que otros este por debajo de las unidades de protección colectiva para las enfermedades inmunoprevenibles”, indicó.
Morales Fuhrimann apuntó que las consecuencias de dicha deficiencia en la distribución de los recursos tienen un impacto dramático, ya que sufren innecesariamente las personas a quienes el sistema de salud podría atender con eficiencia, efectividad y dignidad.
Por ello, señaló el representante de la OPS, la calidad en la atención y la distribución de los recursos deben ser parte del nuevo modelo de atención impulsado por la nueva administración, siempre “buscando niveles óptimos de seguridad, efectividad, oportunidad, eficiencia y acceso educativo”.
