Especialistas, académicos y poetas analizan el humanismo en el Segundo Encuentro de Estoicismo México

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En la primera jornada del Segundo Encuentro de Estoicismo México. Humanismos, organizado por el Espacio Cultural San Lázaro de la Cámara de Diputados, especialistas, académicos y escritores, externaron comentarios sobre lo que es el humanismo, sus ópticas y su relación con la literatura.

La Secretaria General de la Cámara de Diputados, Graciela Báez Ricárdez, expresó que no hay mejor compañía que un libro y se debería empezar por autores clásicos. “No pierdan el tiempo con los libros de autoayuda ni con resúmenes”.

“Atrévanse a leer el libro completo; nunca dejen de leer, aunque no lo entiendan. Para qué buscar dioses en otro mundo sino empezamos a conocer a los de nuestro mundo occidental, el cual es enorme, profundo y se debe conocer. Para saber hacia dónde vamos hay que saber de dónde venimos, y eso está en los clásicos”, añadió.

Abordar desde todas las ópticas al humanismo

Con la conferencia “Tres casos de humanismo mexicano: Caso, Vasconcelos y Reyes”, el director general del Espacio Cultural San Lázaro de la Cámara de Diputados, Ismael Carvallo Robledo, afirmó que el humanismo podría dar problemas porque hay muchas maneras de responder a lo que es ser humano, más cuando se busca recuperar el humanismo mexicano, pues se debe delimitar qué etapa.

Afirmó que con este encuentro se busca abordar desde todas las ópticas al humanismo, dado que habrá quien diga que “no debe ser el humanismo la ideología nacional y otros que sí”. Añadió que, según definiciones, lo humano se distingue de lo animal, pero el etólogo diría que, aunque el hombre no sólo es animal, el animal está en el hombre; la segunda excepción sería que lo humano es compasivo, y la tercera sería el hombre cultivado.

Dijo que tanto Antonio Caso, José Vasconcelos y Alfonso Reyes son contemporáneos y ejemplos del siglo XX; adquieren presencia histórica en el movimiento generacional Ateneo de la Juventud, de clase media en donde se reunían para leer y discutir una renovación ideológica, intelectual y filosófica.

Precisó que Alfonso Reyes es el hombre más importante de las letras de la lengua española, en América; José Vasconcelos consagró su vida a la función pública, a la política y con una magnitud histórica, y Antonio Caso se convirtió en el pilar de la institucionalización de la filosofía en México antes de José Gaos. “Sus textos son ejemplo de lo que podría decirse que es el humanismo mexicano”.

Se tiene una tradición humanista complicada

El encargado de impartir el curso especial “Introducción al humanismo”, Sebastián Porrini, profesor en letras e integrante de la Asociación de Estudios Humanísticos, mencionó que cuando se habla de humanismo se debe pensar que la raíz del mismo está en occidente. “En realidad la primera concepción de lo humano viene de un término que es latino y tiene una raíz que es hum”.

Destacó que la política es más práctica que teoría, y que la teoría en última instancia tiene que ser el colchón que sustente a eso. Agregó que se puede incorporar al ser humano a un lenguaje simbólico, por medio de la naturaleza y para ello no sirve la razón ni lo irracional, sino debe tener una capacidad mayor ya que el lenguaje simbólico es trascendente.

Consideró que se tiene una tradición humanista complicada, confusa, mezclada, problemática pero viva. “Hablamos de humanistas del siglo XX, a mí me da mucha pena que en mi país no se lea ni a Vasconcelos ni a Reyes, yo creo que sólo un mundo ignorante como se nos quiere imponer hace que no leamos a semejantes monstruos”.

Moral pagana implica un fin humano

Al dar la conferencia magistral “Para ser grande sé entero. Reis, Teive y Pessoa. Educando al estoico”, el escritor Mario Bojórquez, del círculo de poesía, explicó que lo que es común para toda moral pagana implica un fin humano, la moral pagana es de orientación y disciplina, mientras que la moral cristina es de renuncia y desapego; por otro lado, la moral epicureísta es la tendencia hacia la felicidad por la armonización de todas las facultades humanas.

Aseguró que cuando se habla de que es una obra fragmentada no se exagera sino es la verdad más pura, pues así lo demuestran diversos fragmentos de Pessoa publicados en “El argonauta de las sensaciones verdaderas”, obra crítica heterónimo, que acompaña al “Andamio. Obra completa de Alberto Caeiro”.

“Estos fragmentos nos indican una interpretación de las dos escuelas filosóficas que se reúnen alrededor de este trabajo. El estoicismo y el epicureísmo frente al cristianismo que Ricardo Reis llama el ‘cristismoc”, añadió.

Profundizar en vínculo de la literatura y el humanismo

En el conversatorio “Humanismo y literatura: Diálogo de la flor y el canto”, Tania Hernández Cervantes, investigadora del Centro de Estudios para el Logro de la Igualdad de Género, expresó que el conservatorio se pensó para profundizar en el vínculo de la literatura con esa noción de filosofía estoica y el humanismo.

Argumentó que el título busca evocar una tradición prehispánica, dado que el contenido de este encuentro es el humanismo, con el propósito de hurgar un poco más en los humanismos prehispánicos o mexicano. “La idea es explorar esas conexiones entre humanismo y la literatura mexicana, así como el humanismo prehispánico y poder tener de forma lucida de qué se está hablando cuando se hace referencia de humanismo, qué dice y qué responde la literatura”.

El escritor, ensayista, traductor y maestro en literatura mexicana, Jorge Mendoza Romero, dijo que en los últimos años el significante humanismo ha sufrido varios cortes que lo impiden erigirlo sin reservas como ideal normativo o tercer idea reguladora. El humanismo náhuatl, relató, se gestó en el primer siglo de la Colonia, es decir de 1521 a 1621 mediante la aculturación extensiva de la nobleza náhuatl del centro de México.

La operación analítica que se impone, dijo, es preguntarnos qué queda de él, cuál es el resto fecundo frente a todo lo que ha sido necesario desechar comenzando por lo que le daba fundamento. “El eurocentrismo como particular forma de entender la relación entre lo universal y lo particular, por una parte, y la centralidad atribuida al hombre, por la otra”.

La poeta, traductora y estudiante de maestría en Literatura Hispanoamericana, Andrea Rivas, habló sobre el trabajo de la también poeta Laura Cárdenas, quien a través de su libro “Perseguido olor a casa” (1982) se abrió a la intimidad autobiográfica, y que inició su obra con la siguiente nota: “éste es un libro doloroso, representa un intento de coherencia y tiene mucho de autobiográfico, lo hice porque supe desde un principio que tenía que hacerlo, que debía ser valiente, que esto, de algún modo, le serviría a alguien”.

Andrea Rivas cuestionó que nadie escribiera respecto de este libro en el México de 1982, aunque consideró que posiblemente ninguna persona lo hizo por el carácter autobiográfico o la audacia con la que la autora exponía la violación por parte de su padre, los abusos de sus maestros, la complicidad mustia de su madre, la forma de autonomía corporal, etcétera. “Un libro como el de Cárdenas, de tono conversacional, con ecos de vanguardia, directo y señalamiento de violencia patriarcal, no habría sido recibido con brazos abiertos”.