El diputado Rafael Hernández Soriano (PRD) afirmó que la Secretaría de Educación Pública (SEP) debe informar al Congreso de la Unión el destino de tres mil 657 millones 393 mil 460 pesos del presupuesto asignado a la instalación de bebederos de agua potable en 257 mil 825 escuelas públicas.
“Además de incumplir una meta del gobierno federal, (la SEP) ignoró una recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para abatir los elevados índices de obesidad y diabetes en la población infantil mexicana”, indicó en un comunicado el también secretario de la Comisión de Derechos de la Niñez.
Comentó que la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, que sesiona en el Senado de la República, aprobó el punto de acuerdo en el que se solicita información a la SEP respecto a los recursos públicos para la construcción, instalación, operación y mantenimiento de bebederos escolares en el periodo 2015 y 2018.
Explicó que ya se venció el plazo previsto por el gobierno federal para dotar de bebederos a 257 mil 825 escuelas del Sistema Educativo Nacional.
Sin embargo, agregó, “de acuerdo con el informe más reciente del Instituto Nacional de la Infraestructura Física Educativa (INIFED), inexplicablemente la instalación no supera el 10 por ciento, a pesar de que a la SEP se le dio el presupuesto para ello”.
“Además del tema económico y la opacidad con que se han manejado los recursos públicos por parte de la SEP, el gobierno federal menospreció la salud de la niñez ante el acelerado aumento de casos de obesidad y diabetes”, subrayó Hernández Soriano.
Expuso que, de acuerdo con el informe del INIFED 2015-2017, lleva poco más de nueve mil bebederos instalados de la meta de ese ciclo escolar y siete mil 365 adjudicados para el ciclo escolar 2016-2017.
El diputado perredista señaló que, de acuerdo con el INIFED, “por diversas cuestiones operativas, a seis meses de haber concluido el plazo que enmarca la ley y a pesar de habérsele asignado durante tres ejercicios fiscales el monto presupuestal para la construcción de bebederos, no se ha llegado a lo dispuesto en la ley para las 257 mil 825 escuelas”.
Aseveró que “tampoco (se ha llegado) a la propia meta delimitada por el Instituto, que es de 11 mil 34 bebederos para ciclo 2015-2016; ocho mil para el ciclo escolar 2016-2017 y otros ocho mil para el ciclo escolar 2017-2018”.
Recordó que el Programa Nacional de Bebederos Escolares es parte integral de la reforma educativa y a la vez el principal instrumento de una política pública del gobierno federal para mejorar la salud y el bienestar de los niños, niñas y jóvenes.
La mejoría en la salud se pretende lograr mediante el fomento de hábitos de alimentación y modos de vida saludables, así como con el consumo de agua potable de forma gratuita en los planteles de educación básica, en lugar de tener como única opción bebidas azucaradas.
Añadió que las reformas a la Ley General de Infraestructura Física Educativa tuvieron como objetivo central que todas las escuelas de educación básica del Sistema Educativo Nacional contaran con bebederos de agua con sistemas de purificación.
Con base en estas reformas se asignaron recursos federales, específicamente para la instalación y operación de dichos bebederos, algo que no ocurrió y que el gobierno federal, a través de la SEP, tiene que rendir cuentas, sostuvo Hernández Soriano.