Por Janet Galindo
La Ciudad de México aparece rota y confrontada. Sus problemas no se reducen a inseguridad y economía recesiva, como asegura la narrativa oficial. Se trata de una madeja que inicia con la fragmentación familiar y la pérdida de valores y guía. De ahí emanan violencia, delincuencia, falta de educación, deshonestidad, desempleo…el rostro más atroz de la deshumanización, dice Mariana Morán, Presidenta del partido político local ELIGE.
De acuerdo a cifras oficiales, el 12% de todos los delitos perpetrados en el país se realizan en la Ciudad de México. Ahí la incidencia delictiva anual es de alrededor de 242.850, lo que ubica a la entidad en la segunda a nivel nacional, superada sólo por el Estado de México.
En las 16 alcaldías campean delitos tanto de alto como de bajo impacto social. El 80% de ellos son patrimoniales, como el robo o asalto a transeúntes, robos a negocios y casas habitación y fraudes. “Pero cada vez observamos un ascenso de homicidios, secuestros y extorsiones. También se detecta mayor agresividad y violencia en la perpetración de delitos. Vivimos una transculturización criminal que inicia desde el hogar”, asegura Morán, también Doctora en Pedagogía.
Para la Presidenta de ELIGE “vivir en un núcleo de violencia, abuso y crueldad es detonante de replicar tales actos y normalizarlos. Incluso se detona la apología delictiva, la narco-cultura. No en vano, observamos que cada vez disminuye más la edad de niños vinculados al narcomenudeo o sicariato. Pero todo tiene su origen en el tipo de valores y ejemplo que se vive en la familia. No es de extrañar que si a un niño de un año le celebran la broma de beber cerveza, a los 12 años de edad ya sea un alcohólico, por ejemplo”.
En sociedades en las que se impone la excesiva competencia y el egoísmo, “disminuye la capacidad que tenemos de compartir y dar. Paradójicamente, es lo único que nos permitirá reducir la ignorancia y los vicios”, asegura la presidenta de ELIGE.
“Mi abuela decía que lo único que nos permitía mejorar era tener una perspectiva diferente de vida, y eso sólo se lograba con una mayor educación. Los abuelos eran pilares de la familia y se nos enseñaba a respetarlos. Hoy sus opiniones se desdeñan. Las figuras de autoridad moral, como el cura y el maestro, desaparecieron como figuras de autoridad moral”, refiere Mariana Morán.
Con tales antecedentes, no resulta extraño que ella con un grupo de profesionistas, sin antecedentes políticos, sindicales o religiosos, formara una asociación civil altruista que después se convirtió en un partido político local.
“Eran 33 aspirantes a convertirse en partido político. La diferencia entre ellos y nosotros es que ellos tenían padrinos poderosos, dinero, recursos y gente. En ELIGE nuestros activos sólo son el corazón y los ideales”, refiere Morán.
_ ¿Cómo un grupo de profesionistas logró convertirse en partido político?
_ Sólo seguimos al pie de la letra los lineamientos marcados en la ley. Asumimos que si las cosas se hacían como estaban predeterminadas lo lograríamos. Y así fue: un grupo de ciudadanos de a pie hoy podemos ser un partido político.
No fue fortuito. Morán confiesa “tenemos siete años de planearlo, sólo que no existía en ese momento una convocatoria para partidos locales”.
_¿Impugnaron a ELIGE?
-Si. Morena. El Partido en el poder. No quería dividir el pastel presupuestal. Pero finalmente la impugnación no prosperó porque teníamos todo en orden. Creemos en hacer las cosas bien, en establecer lineamientos claros para trabajar en el fortalecimiento y educación de las familias. Para nosotros la base de cualquier cambio social y la construcción de un futuro más feliz y armonioso para todos es la educación.
Sin embargo, “somos realistas y no creamos falsas expectativas, como aseverar que erradicaremos de inmediato la delincuencia, pero sí incidiremos en que disminuya2, asevera Mariana Morán.
Más aún: “Ya contamos con un programa político, basado en la integración de la familia y la preservación de valores, no sólo para disminuir los índices delincuenciales, también para mejorar la educación y crear mayor profesionalización que incremente el índice de empleos bien remunerados”.
Entretanto, el corazón del país presenta una gran fragmentación, desencanto y confrontación. “debemos empezar a generar ideas de solidaridad y crecimiento conjunto, en trabajar para desestimar la incertidumbre y falta de oportunidades. Debemos reinventar nuestra ciudad”.
DELITOS EN LA CIUDAD DE MÉXICO DURANTE OCTUBRE
Se generaron 19,648 carpetas de investigación. Es decir, indagatorias iniciadas en la Agencia del Ministerio Público.
De éstas el 4.9% fueron contra la vida y la integridad corporal. 1.0% Contra la libertad personal. 14.9% contra la sociedad, 3.3% contra la libertad y seguridad sexual. 56.2% contra patrimonio.
Las alcaldías que registraron mayores índices delictivos de acuerdo a cifras oficiales son Cuauhtémoc 83%, Benito Juárez 54.7%, Iztacalco 32%, Venustiano Carranza 30.9%, Iztapalapa 25.9%.
