Gracias a avances en mapas de grietas y modelos de interpretación realizados por geólogos e ingenieros especialistas, así como la reciente aprobación de la Ley de Reconstrucción, comenzarán los trabajos de rehabilitación en la delegación Tláhuac, específicamente en las colonias Del Mar, Agrícola Metropolitana, Miguel Hidalgo, Ojo de Agua, Santa Catarina y San Andrés Mixquic con una inversión cercana a los mil millones de pesos, anunció el Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera Espinosa.
“Es la mayor intervención en la historia de la ciudad en la zona de Tláhuac, que debió haberse hecho hace muchos años antes de permitir todos los asentamientos que hicieron en zonas de riesgo en la CDMX. No podemos dejar a la gente a su suerte. Es muy caro lo que se va a hacer ahí, sí. Pero si no lo hace la Ciudad de México, entonces lo que vamos a hacer es una condena anticipada de lo que puede suceder en Tláhuac”, afirmó.
Con la participación de la Asamblea Legislativa, las secretarías de Finanzas, Desarrollo Social (SEDESO), Desarrollo Urbano y Vivienda (SEDUVI), el Sistema de Aguas (SACMEX) y la Comisión para la Reconstrucción, el gobierno capitalino ejecutará un plan de trabajo que consta de tres etapas: estudio para la demolición, infraestructura hidráulica e inyección a grietas, para finalmente proceder a la recuperación de banquetas y vialidades.
Las labores de rehabilitación se realizarán por cuadrantes –que ya han sido identificados–, de acuerdo con el Jefe de Gobierno, es la primera vez que se llevan a cabo “con este nivel de detalle de grietas”.
Se trata dijo, de un trabajo profesional que comenzará a la brevedad; “Desarrollo Social tendrá siempre el censo, el mapeo social de esta zona. El Sistema de Aguas ya hizo el análisis de todo lo que tiene que ver con drenaje e intervención de agua”.
Advirtió que de no llevarse a cabo, la zona sufriría un colapso total.
El geólogo Pedro Vera Sánchez explicó que el problema en la zona es multifactorial y se ha visto magnificado a razón de la actividad sísmica, por lo que el proceso de atención contempla una serie de acciones sistemáticas, entre las cuales se contemplan modificación de vialidades, modernización de infraestructura subterránea, reconfiguración de vialidades y mejoramiento del terreno.
Señaló que la antigüedad de las grietas datan de cuando menos 30 años y se deben a factores meramente naturales, aunque factores como los asentamientos humanos y la circulación de vehículos pesados.
Los trabajos técnicos podrían durar entre 5 y 6 meses, aunque podría variar; 700 casas podrían ir a proceso de demolición y de acuerdo con el geólogo, una vez que se realice el proceso de tratamiento con inyección y monitoreo, podría ser viable la reconstrucción en esos terrenos.
Cabe recalcar que el hundimiento es un fenómeno natural, “es como decir que no va a volver a temblar, sin embargo, podemos recuperar las condiciones del terreno y hacerlo viable para que pueda seguir estando la población”, sostuvo el especialista.