Sin embargo, el senador Mario Delgado aseguró que los hechos registrados ayer en Tláhuac, donde fue abatido el líder de un cártel, obligan a que el Jefe de Gobierno sea citado por la Cámara alta para rendición de cuentas.
“Lo que ocurrió es una expresión de la delincuencia en la Ciudad y no ha habido una respuesta del gobierno. Hay un descuido de la autoridad. Es muy preocupante ver al Jefe de Gobierno regalando patrullas en Acapulco y en Ciudad Juárez mientras aquí pasa esto”.
El presidente de la Comisión de la Ciudad de México lamentó que Mancera se promocione políticamente utilizando recursos locales, mismos que deberían ser invertidos para hacer frente a la inseguridad.
Aún así Mancera dijo que el resultado de este operativo se debe a un trabajo coordinado de varios meses entre la Policía de Investigación capitalina, la Secretaría de Marina y la Procuraduría General de la República (PGR).
El jefe de Gobierno informó que hasta el momento las autoridades tienen asegurados 50 bicitaxis y 16 personas están detenidas, ya que intentaron o participaron en la quema de vehículos y bloqueos.
El analista político Ricardo Alemán aseguró que El delegado de Morena, Rigoberto Salgado, era “la principal tapadera” del criminal motejado como el Ojos, jefe del narco en esa zona de la capital, abatido ayer por la Marina.
Todos en Tláhuac sabían que el Ojos mantenía el control del ambulantaje y de los llamados mototaxis, transporte que moviliza al 90 por ciento de los habitantes de la zona.
Todos sabían que la droga se distribuía y vendía mediante mototaxis y en el incontenible comercio informal, la principal actividades de la demarcación.
Y todos sabían que el jefe delegacional de Tláhuac –y toda su familia–, han sido aliados del Ojos por años. Más aún, esa banda criminal financió desde su nacimiento al partido Morena en la capital del país.