INICIAN OPERACIÓN OFICINAS MÓVILES CONTRA VIOLENCIA DE GÉNERO

Como parte de las acciones para erradicar la violencia de género, la oficina móvil de la Secretaría de las Mujeres Naucalpenses y la Igualdad Sustantiva inició sus recorridos en San Francisco Chimalpa.
Se trata de dos unidades móviles que la Secretaría adquirió con recursos estatales para la Mitigación de la Alerta de Violencia de Género, los cuales transitarán por las colonias que presentan mayor índice de violencia de género en la demarcación.
El objetivo, subrayó Adriana González Furlong, titular de la Secretaría de las Mujeres, es llevar los servicios hasta las comunidades, a fin de que las mujeres no se trasladen al Palacio Municipal para recibir ayuda.
“Nosotros ya hemos realizado trabajo previo en campo, sin embargo, ahora venimos con estas oficinas móviles para que las mujeres no tengan que desplazarse hasta nuestras oficinas, ya que eso implica que tengan que pagar transporte de ellas y a veces también de sus hijos.
“La Presidenta Municipal, Patricia Durán, nos ha instruido continuar con el trabajo de campo, pero ahora con estos camioncitos que nos permiten llevar la atención hasta las comunidades”, dijo.
Tras un estudio, la Secretaría identificó 18 colonias a las cuales la dependencia acudirá con la unidad móvil: pueblos, unidades habitacionales y colonias populares figuran en la lista.
Las unidades visitarán dos comunidades diariamente, en las que un equipo de psicólogas y abogadas brindarán atención a las mujeres que lo soliciten. Posteriormente, realizarán una visita adicional para dar seguimiento a las usuarias o lo harán vía telefónica.
“Dependiendo del caso de cada mujer, será canalizada a otras instancias, pueden ser referidas a la Casa de Transición, a un centro psiquiátrico, o podemos acompañarlas al Ministerio Público para que hagan su denuncia”, explicó.
En San Francisco Chimalpa, mujeres y jóvenes se acercaron al módulo para preguntar, en su mayoría, por orientación psicológica. Para Adriana, una joven de 20 años, recibir orientación emocional en su comunidad representa un gran apoyo, pues no cuenta con los medios necesarios para hacerlo.
“Existen mujeres, como yo, que no podemos bajar hasta sus oficinas para recibir la atención. Vine porque estoy en una situación de violencia y aquí fueron muy amables conmigo, me dijeron que me van a llamar para tener otra sesión por teléfono”, declaró.