Al referirse a los lamentables acontecimientos ocurridos ayer en el Colegio Americano del Noreste, de Monterrey, el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México, Enrique Graue Wiechers, llamó a los universitarios a tomar conciencia de la gravedad de los hechos y señaló que es preciso reconocer que estamos fallando como miembros de una sociedad, porque hemos dejado de ver al otro como un igual. Hemos roto y dejado romper –enfatizó– los vínculos que, como personas, nos unen, nos identifican y nos hacen mejores.
Señaló que es atroz que niños, niñas o maestras reciban balazos en una escuela. Es atroz, recalcó, que un niño decida cargar con una pistola para disparar a otros, que son sus iguales.
El rector de la UNAM dijo que en el país hemos dejado que la interacción diaria se desarrolle enterrando nuestros principios más básicos y, en el proceso, nos hemos alejado los unos de los otros. Nos hemos hecho ajenos y le hemos dado a la violencia una enorme oportunidad para redefinir nuestras relaciones.
En una reunión de trabajo con el Colegio de Directores de esta casa de estudios, Graue Wiechers resaltó que, como mexicanos, en el país “hemos legitimado y empoderado a la violencia en una enorme cantidad de formas, la hemos aceptado, lamentablemente, haciéndola una parte ya de nosotros mismos.
“Debemos, todos, hacer una profunda reflexión, una revisión honesta de lo que hacemos por nosotros mismos y por los otros, de cómo construimos esos vínculos que hoy aparecen irremediablemente rotos. Esto no puede ni debe ser un mandato de autoridad, debe ser un imperativo de la razón y de la conciencia, porque nos toca a todos transformarnos y reconstruirnos como sociedad y como personas”, subrayó.
Graue afirmó que sólo reconociendo plenamente la existencia de los otros, y de sus necesidades, podremos darle sentido a los valores fundamentales que hoy parecen lejanos, y resaltó:
“Hace falta valentía y coraje para reconocer que hemos perdido la sensibilidad humana que antes era natural. Realmente espero que tengamos esas virtudes porque, de otro modo, sólo haremos más larga la noche, más profundo el dolor y más insoportable la tragedia”.
Durante su intervención, el rector de la UNAM manifestó su “profundo sentir a las familias de las víctimas, a la del joven involucrado y a la de todos sus compañeros. También a la comunidad del Colegio Americano del Noreste, un abrazo sentido y solidario, que nos permita sobrellevar este terrible hecho y prevenir la oportunidad de que ocurran otros. Esto no debe volver a suceder y sólo como comunidad podremos evitarlo”.