Guadalajara, Jalisco.- El liderazgo, la autenticidad y el compromiso social son claves para que un emprendimiento sea exitoso, afirmó Marisa Lazo, empresaria y fundadora de Pastelerías Marisa.
Durante la más reciente edición de Aula SOC, la reconocida empresaria y “tiburona” de Shark Tank México, agregó a lo anterior que la apertura para preguntar y recibir consejos de expertos y otros empresarios se vuelve medular al momento de construir una empresa.
Su intervención se centró en responder las preguntas esenciales del quehacer empresarial contemporáneo: quién lidera, qué impulsa, cuándo evolucionar, dónde influir y por qué hacerlo desde la humanidad y la empatía.
La vida empresarial se trata de contribuir
Lazo abrió su ponencia subrayando que el éxito no debe definirse sólo en resultados o números, sino en la persona en la que uno se convierte durante el camino.
Recordó a los asistentes que es posible alcanzar metas profesionales sin perder cercanía, empatía o humanidad, y que el verdadero impacto sucede cuando se contribuye al bienestar de las familias, comunidades y colaboradores.
Con una narrativa profundamente personal, compartió cómo la felicidad en el trabajo se nota “por los poros”, y cómo ese entusiasmo genera equipos más comprometidos.
También llamó a los asesores de SOC e inmobiliarios a no olvidar el impacto social inherente a su labor: “si ayudan a una familia a mejorar su vida financiera, hacen una diferencia real en su comunidad”.
Liderar es preguntar, aprender y rodearse de expertos
A lo largo de su conferencia, la empresaria enfatizó la importancia de la curiosidad como motor del crecimiento profesional.
Aseguró que muchas personas fallan por no atreverse a preguntar, ya sea por pena, inseguridad o ego.
Ella, en cambio, atribuye muchas de sus mejores decisiones empresariales a su disposición a consultar a quienes saben más.
Relató cómo sus errores, decisiones difíciles y aprendizajes la han llevado a fortalecer una cultura empresarial donde preguntar, prepararse y perseverar son valores innegociables. “Los negocios toman tiempo, paciencia y aprendizaje constante”, afirmó.
Un liderazgo basado en confianza, humildad y cultura organizacional
Lazo compartió historias internas de su empresa para ilustrar el poder de ver a los colaboradores con confianza, impulsarlos a crecer y permitir que aporten ideas.
Recordó cómo decisiones operativas clave han venido de su equipo, y cómo uno de los grandes aprendizajes de su trayectoria ha sido “soltar el ego” para dar espacio a que otros lideren.
Habló también de su evolución como líder: pasar de no pedir disculpas a reconocer públicamente sus errores, formalizar procesos más exigentes sin perder cercanía y construir una cultura basada en la autenticidad.
“Un líder auténtico inspira; un líder de rol sólo genera obediencia”, expresó.
Historias que transforman: educación, vivienda digna y salud integral
Uno de los momentos más emotivos de su conferencia fue cuando narró el impacto de los programas sociales implementados dentro de su compañía.
Desde la Red Médica Marisa, que da acceso a especialistas por una cuota simbólica, hasta Dignifica tu Casa, que mejora viviendas de colaboradores, la empresaria reforzó que el verdadero éxito empresarial está en elevar la calidad de vida de quienes forman parte del equipo.
Destacó también el programa interno de preparatoria, con generaciones completas de colaboradores que hoy cuentan con estudios concluidos gracias a este apoyo.
Historias como la de Sor, hoy líder de producción, o Isidro, gerente de almacén, ilustraron el poder de la movilidad social dentro de un entorno empresarial humanista.
Espiritualidad, mindfulness y amabilidad: el lado humano del éxito
Lazo cerró su participación recordando que las relaciones humanas, la paciencia, la amabilidad y la vida espiritual son elementos esenciales para una vida plena.
Afirmó que la inteligencia emocional es tan importante como la empresarial, y animó a los asistentes a cultivar prácticas diarias de reflexión, servicio y agradecimiento.
Su mensaje final fue una invitación a vivir y trabajar con presencia, a celebrar los triunfos ajenos, y a recordar que toda empresa tiene la responsabilidad de transformar positivamente a su entorno.
Juntos, lo hacemos real.



