Actualmente toda instancia que preste dinero en el país busca apoyar a los microempresarios, pues la mitad del universo empresarial está constituido por ellos.
Sin embargo, también son el grupo que más desconfía de los créditos y especialmente de los bancarios, de acuerdo con la última Encuesta Nacional sobre Productividad y Competitividad de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Enaproce).
Las razones sentirse inseguros al respecto se ubican 60% en el costo que les traería aceptar uno y 18% en la falta de confianza en las instituciones que los ofrecen.
Es por ello que en los últimos años se han abierto nuevos caminos para que los microempresarios puedan acceder a otros financiamientos hechos a su medida, por vías sencillas y reguladas, así como con facilidades de pago.
Un ejemplo de ellos se encuentra en línea. A través de empresas de financiamiento como Creze, los microempresarios tienen una opción de cotización para un financiamiento las 24hrs del día, todos los días de la semana y con la protección de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
Esta opción en particular está especializada en nuevos pequeños y micronegocios, por ello crearon un trámite mucho más ágil, con requisitos básicos para aquellos que van arrancando su negocios, pero que en el proceso requieren obtener el dinero de manera casi inmediata, sin las complicaciones y tiempos del banco, comenta David Lask, cofundador de Creze.
A pesar de su importancia en cantidad de negocios, los micronegocios son la clase de empresas que menos obtienen financiamiento. Según la más reciente Encuesta Nacional de Financiamiento de las Empresas (Enafin),solo el 24% de las micro empresas tuvieron financiamiento en comparación con 57% de las medianas empresas.
La importancia de apoyar a este grupo de emprendedores nace también de las necesidades particulares de estos negocios.
Pues a diferencia de las medianas y grandes empresas, las micro o pequeñas empresas se enfrentan con conflictos económicos que evitan el crecimiento de su inventario, el pago de sus proveedores o incluso existen casos en los que ya cuentan con varios créditos de banca tradicional y les niegan uno nuevo, recuerda el cofundador de Creze.
Lamentablemente, entre la inmediatez de requerir un préstamo y el desconocimiento de las opciones, los nuevos empresarios pueden llegar a ser defraudados. Para evitarlo, David Lask recomienda a los emprendedores siempre “verificar que esté registrada formalmente, que cuente con las regulaciones pertinentes para su funcionamiento, nunca dar información a alguna empresa que no cuente con estos registros o que les pida algún anticipo para el otorgamiento del crédito”.