Al asumir el cargo de presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Senadores, Mónica Fernández Balboa, de Morena, ofreció apertura y sensibilidad para conducir apropiadamente los trabajos que se desarrollen en el pleno, al amparo de los principios de legalidad e imparcialidad.
“Somos la Legislatura de paridad de género, la que por primera vez en la historia de México integra mujeres y hombres en equidad (…) ya hemos hecho norma y se volverá costumbre”, declaró.
Ante el pleno, expresó: “es un día histórico para mí en lo personal”, pero también para esta Cámara Alta, ya que en un ejercicio abierto, transparente, democrático en el que se demostró una vez más que la política es un instrumento útil para construir acuerdos y facilitar que las instituciones funcionen.
“Se abre la puerta para una nueva época, a una nueva etapa de nuestro país, donde la búsqueda de espacios y de oportunidades de igualdad para las mujeres es una realidad y este Senado mexicano es pionero y ejemplo de este camino.
En este marco, ofreció privilegiar el consenso sobre la agenda legislativa con todos los grupos parlamentarios; “definiremos prioridades y cumpliremos con nuestras obligaciones y requerimientos legales en tiempo y forma”, expresó.
Fernández Balboa –segunda mujer en presidir la Mesa Directiva del Senado, después de la priista María de los Ángeles Moreno-, dijo que nadie debe sorprenderse cuando brote el disenso y la confrontación, pues ello es parte de la democracia, pues lo anormal sería que no ocurriera.
Por el contrario, añadió, la búsqueda de coincidencias y acuerdos a partir de las oposiciones enriquece a las instituciones parlamentarias.
Esto es, las decisiones que se adopten serán en todo momento con apego a la Constitución, a la Ley Orgánica del Congreso y al Reglamento del Senado, anteponiendo siempre el interés general y la institucionalidad.
Llamó a reconstruir juntos la confianza de la ciudadanía en la participación política y en las instituciones, además, refrendó su compromiso por mantener una estricta disciplina con el gasto, así como por una administración eficiente, ágil y eficaz que apoye su labor sustantiva y de legislar a favor de México.
En tal sentido, dijo que la transparencia es y seguirá siendo un objetivo y una tarea permanente. “La Patria es Primero”, resaltó al evocar al insurgente de la independencia de México, Vicente Guerrero.
Refrendó a los Poderes Ejecutivo y Judicial la voluntad política de la Cámara Alta para que siempre en corresponsabilidad, se mantenga una relación de autonomía y respeto, pero de unidad y fortaleza de Estado, mirando siempre por el bien del país.
Dejó claro que los mejores logros solo se alcanzan con la suma del esfuerzo colectivo; “por eso me propongo mantener durante el segundo año una conducción respetuosa, con estricto apego a las normas jurídicas que regulan la vida parlamentaria”.
Rechazó que su designación sea una simple concesión de género sino un compromiso mayor con el país.
Para la legisladora de Morena, la tarea de los senadores es la de impulsar buenas leyes para México, por ello llamó a profundizar en la apertura de la Cámara Alta, para que quienes tengan algo que aportar, cuenten con espacios para que se les escuche.