Morenistas y aliados aceleran debate en el Senado sobre reforma a la GN

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El Senado de la República se apresta a iniciar la discusión formal de la minuta de la Cámara de Diputados para que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) controle administrativa y operativamente a la Guardia Nacional. Este jueves en sesión vespertina convocada para analizar la minuta, se desecharon con rapidez, con los votos oficialistas y aliados, tres mociones suspensivas que promovieron los partidos del bloque de contención para evitar la aprobación exprés.

En riesgo decisión militar en sucesiónLuego, en la presentación del dictamen, la presidenta de la Comisión de Justicia, la ministra en retiro, Olga Sánchez Cordero, refirió, sin argumentaciones jurídicas, razones administrativas y de coordinación para adscribir a la Guardia Nacional en la Sedena. Defendió, eso sí, que la Guardia Nacional es una institución civil con el argumento de que “el presidente es el comandante supremo de las Fuerzas Armadas, es decir es un civil”. Expuso que detectaron problemáticas para la operación de la Guardia Nacional como “dificultades para el ejercicio del mando del ejercicio táctico y operativo por falta de unidad técnica y disciplinaria”, debido a que ese organismo se integró de agrupamientos con distintos orígenes y formaciones: la Policía Federal, Policía Naval, la exPolicía Militar, sin vínculos con esas instituciones de origen. En todo caso, la senadora planteó que siempre la Guardia Nacional “deberá rendir informes oportunos y amplios a este Senado y su titular deberá presentarse a comparecer las veces que este Senado se lo requiera“. El presidente de la Comisión de Estudios Legislativos, Rafael Espino, de Morena, dijo que no desconoce los cuestionamientos de legalidad a la minuta, “pero considero prioritario apoyar al Ejecutivo en estos ajustes operativos”. Advirtió además que de no concretarse la reforma, al fin del sexenio podría verse una situación peor que al inicio de éste. “Le estamos entregando a las Fuerzas Armadas una responsabilidad que no podrán cubrir por si solas. Si no apoyamos el modelo con base a lo aquí señalado, corremos el grave riesgo de terminar peor de como empezamos”, dijo. Ya presentado el dictamen, enseguida siete senadores subieron a tribuna para exponer ante el pleno los votos particulares que emitieron la víspera, y en contra, durante la dictaminación de las comisiones unidas de Justicia y Asuntos Legislativos. Subieron entre otros los senadores Claudia Ruiz Massieu, Miguel Ángel Macera, Emilio Álvarez Icaza, Manuel Añorve, Verónica Delgadillo. Luego, los ocho grupos parlamentarios comenzaron a presentar sus posicionamientos, para posteriormente entrar a las rondas de discusión. Concluida esa etapa se prevé por la noche la votación en lo general, pero vendrá luego la presentación de reservas, lo que podrá extender la discusión y votación incluso las primeras horas de este viernes. En su posicionamiento, el coordinador del Grupo Plural, Emilio Álvarez Icaza, advirtió que se dice que con la Guardia Nacional mejorará la seguridad, cuando hoy cuenta con 115 mil elementos y el año pasado apenas detuvo a 14 personas resultado de sus investigaciones y presentó a 50 personas en materia de delincuencia organizada. “Participó en 2% de las detenciones, aunque tiene 20% de la capacidad de fuerza. Los resultados no pueden ser más mediocres, pues están persiguiendo migrantes, repartiendo gas, construyendo obras”, expuso. El senador, expresidente de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, advirtió que si el presidente Andrés Manuel López Obrador se plantea militarizar a la Guardia Nacional porque cambió de opinión, “quiere decir que el expresidente Felipe Calderón tenia razón”, y eso debe explicarlo al Senado, responsable de aprobar la estrategia de seguridad. Además planteó riesgos para la sucesión en 2024. “Vimos al comandante de la Guardia Nacional (Luis Rodríguez Bucio) en mitines de Morena fallando a su carácter de institución de Estado. Al general secretario (Luis Cresencio Sandoval) invitándonos a sumarnos a la 4T. ¡Esos mensajes claro que fundan la desconfianza de lo que pudiera suceder en 2024! ¿A quien van a obedecer? A la Constitución o al presidente?”, dijo.